Cómo sobrevivir en la Mostra

La lucha por la supervivencia hizo temblar la tierra de la Mostra. Dos películas excelentes, «El foso», del chino Wang Bing, y «Essential Killing», de Jerzy Skolimowski, agitaron las conciencias. En la primera, el director de «West of the Tracks» se ha ganado tres cadenas perpetuas contando las vicisitudes de los prisioneros de un campo de concentración en el desierto de Gobi en 1960: es un filme duro, sin concesiones, pero tremendamente conmovedor. En la segunda, el guionista de «El cuchillo en el agua» nos obliga a pegarnos al cuerpo de un talibán convertido en animal salvaje en su huida por los bosques polacos. Excepto por unos innecesarios flashbacks, nada sabemos del talibán: sólo es un cuerpo en fuga que nadie juzga. Skolimowski consigue abstraerse de las connotaciones políticas de su premisa para facturar una película poderosísima sobre la relación del hombre con la naturaleza. Vincent Gallo fue excusado por Skolimowski, que defendió su valía profesional por un papel que tiene la Copa Volpi escrita en la cara. Más difícil lo tendrá Gallo con «Promises Written in Water», su nuevo «egotrip» como director, actor, montador y músico. Cassavetes de segunda regional, Gallo está convencido de su genio, pero aquí ha metido la pata: la melancolía de su cine anterior ha dejado paso a una pose errática con esta historia de amor rota en pedazos y filmada en blanco y negro y 16 mm.