Quiere aprender a ser un superviviente Recuerde el número 3

Póngase en situación: usted conduce por un camino de montaña en el que, desgraciadamente, no abundan las líneas rectas. De repente, surge de la nada una inesperada curva más pronunciada de lo que podía esperar. Sus manos tiemblan, su corazón se acelera, y la sonrisa que le acompañaba hace tan sólo unos instantes le abandona. Pierde el control del coche y no consigue hacerse con él hasta el mismo instante en el que la parte delantera se tambalea al borde de un precipicio.La situación de su vehículo es la siguiente: mitad asomada al vacío, mitad en tierra. Y, por extraño que le parezca, esto no es una película de Hollywood y sus pies bailan al mismo ritmo que el vehículo del que, por cierto, aún no ha terminado de pagar la letra.Si usted es de los que entraría en pánico y saldría rápidamente sin pensarlo, ha de saber que es un superviviente de tipo impulsivo. Si, por el contrario, intenta salir por la puerta trasera, el impulsivo se queda pequeño y es usted alguien mucho más realista. Lo que está claro, en cualquier caso, es que el instinto diferencia a unas personas de otras: las que lo ponen en práctica y las que se quedan en el intento.¿Cuáles son las claves para ser un verdadero superviviente? Tenga en cuenta tres reglas de oro. La primera es que todo el mundo es superviviente, y simplemente tiene que saber cómo llegar a ponerlo en práctica. La segunda que no todo es relativo. Y la última, que somos más fuertes de lo que suponemos. Ésa es la tesis que defiende el escritor Ben Sherwood en su libro "El Club de los supervivientes", que la editorial Paidós acaba de publicar en España.Lejos de situar el asunto de la supervivencia como un tema de frikis, Sherwood combina historias reales con estudios científicos y las aventuras vividas por el propio autor dentro de las escuelas de supervivencia de élite del ejército de los Estados Unidos. Todo para dar alguna que otra pista al lector en caso de que se encuentre en la tesitura de necesitarlas.No fuerce sus posibilidadesPero, cuidado. No se pase de "superviviente"y tengamos un disgusto. Tenga siempre presente el número 3. Según explica Ben Sherwood en su libro, este número le dirá el tope máximo al que pueden llegar su experiencias de supervivencia:3 minutos sin aire3 horas sin cobijo en condiciones extremas3 días sin agua3 semanas sin alimento3 segundos sin espíritu ni esperanza¡3 meses sin compañía ni amor!Más allá del 3, por si acaso, no tire demasiado de la cuerda, siempre, claro está, que esté en su mano.¿Cómo pudo alguien sobrevivir al Holocausto? ¿Por qué las cosas buenas siempre le ocurren a las mismas personas? ¿Qué proporción de la vida realmente controlamos?... Ciencia y tecnología se entremezclan en este libro que le trae, además, las claves sobre qué debe hacer si se ve involucrado en un accidente aéreo.Y si el contenido de este libro se le queda pequeño y está dispuesto/a a convertirse en un verdadero superviviente de la vorágine de los tiempos que corren, no dude en visitar la web www.thesurvivorsclub.org, donde las historias más trepidantes sobre los últimos "grandes supervivientes"o los mejores trucos para no morir en un accidente le dejarán boquiabierto. Todo muy a la americana, como ven.