Cataluña

La muerte a tiros de un comerciante atiza el debate sobre seguridad en Barcelona

La muerte anoche de un comerciante que fue tiroteado al enfrentarse a un atracador ha atizado hoy, en un ambiente preelectoral, el debate sobre la seguridad en Barcelona, donde en los últimos seis meses han fallecido tres dependientes a manos de ladrones violentos.

Un dependiente de unos 20 años de edad falleció anoche en su establecimiento, situado en la calle Sant Pere Més Alt de Barcelona, muy cerca del Palau de la Música, al plantar cara con un cuchillo a un atracador, que le disparó un tiro mortal en la cabeza.

El supuesto autor del crimen pudo ser detenido dos horas después por una patrulla de la Guardia Urbana, que le identificó cuando circulaba con un vehículo sospechoso en la plaza de les Drassanes, y ya se encuentra en una comisaría de los Mossos d'Esquadra, a la espera de pasar a disposición judicial.

Este atraco mortal es el tercero que ocurre en el último medio año en Barcelona, después de los robos que acabaron con la vida de una panadera de Sarrià y del dueño de una joyería de la calle Guipúzcoa de Barcelona.

El conseller de Interior, Felip Puig, ha señalado que este nuevo crimen demuestra la necesidad de que haya una "mayor atención"a este tipo de asaltos, por lo que ha defendido que haya una mejor cooperación entre las fuerzas de seguridad y con las entidades asociativas.

En este sentido, el conseller Puig ha avanzado que el gobierno catalán ya está trabajando con la Confederación del Comercio para diseñar nuevas estrategias para prevenir y actuar en contra de este tipo de asaltos violentos a establecimientos comerciales.

En cualquier caso, un portavoz de los Mossos d'Esquadra ha precisado a Efe que la coincidencia de los tres atracos mortales es casual, dado que precisamente en los últimos meses se está registrando un descenso de robos con violencia e intimidación en comercios de Barcelona.

Precisamente, durante el pasado año los delitos de robo con fuerza en comercios bajaron en toda Cataluña un 7,81%, al pasar de 9.352 a 8.622.

A menos de tres meses de las elecciones municipales, el crimen de anoche ha atizado el debate sobre la seguridad en la capital catalana.

El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, ha insistido en su petición de que se refuerce la dotación de los Mossos d'Esquadra en Barcelona y ha abogado por activar más mecanismos de prevención y de cooperación entre las fuerzas de seguridad y los comerciantes.

El candidato de CiU, Xavier Trias, ha denunciado la "inseguridad"que sufre Barcelona y ha pedido más presencia policial "de proximidad"para evitar casos como el de anoche, así como programas sociales que eviten la exclusión que a menudo está vinculada a la delincuencia.

Trias ha apuntado que para garantizar la seguridad ciudadana es necesario "tener liderazgo y creerse el papel de presidente de la Junta Local de Seguridad", presidida por el alcalde, y que reúne a Guardia Urbana, Mossos d'Esquadra, jueces, fiscales y representantes de la propia administración.

La concejal de Seguridad, Assumpta Escarp, ha replicado a Trias, al lamentar su "oportunismo", ya que cree que "enmudece"cuando el alcalde pide al gobierno de CiU más agentes de los Mossos d'Esquadra y en cambio ahora pide más seguridad.

Escap ha destacado además la rápida actuación de la Guardia Urbana, que logró detener al supuesto autor del crimen poco después de los hechos.

Por su parte, el candidato del PPC, Alberto Fernández Díaz, ha denunciado que en la capital catalana "cada vez hay más delincuencia y más violencia"y que el déficit de policía está provocando "que los delincuentes sean los que están cada vez más seguros".

En la misma línea, el alcaldable de Ciutadans (C's), Jordi Cañas, ha considerado que el crimen de anoche "es otro ejemplo de degradación del clima de seguridad"que sufre la ciudad, por lo que se ha mostrado partidario de "limpiar"las calles de delincuentes.