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Boyer continúa grave
MADRID- El equipo facultativo que está tratando a Miguel Boyer desde que ingresó en la Clínica Rúber el 28 de febrero tras sufrir una hemorragia cerebral decidió ayer someterle a una traqueotomía «con el fin de permitir un mejor cuidado de su vía respiratoria y disminuir el riesgo de complicaciones secundarias». El Servicio de Otorrinolaringología confirmó que la intervención se realizó de manera «satisfactoria» y que posteriormente Boyer fue trasladado de nuevo a la UCI. Según personal médico consultado por este periódico, la traqueotomía se realiza a pacientes que no tienen buen nivel de consciencia, que llevan muchos días intubados y que, previsiblemente, seguirán necesitando la respiración asistida más tiempo. A través de un corte en el cuello, introducen una cánula que conecta con la tráquea, asistiendo la respiración por esa vía.
La unidad de Neurocirugía de la Clínica Rúber, «de acuerdo con los deseos de la familia», hizo público un comunicado en el que se afirmaba que la evolución del ex ministro de Economía y Hacienda, de 73 años, ha sido variable «como es frecuente» en pacientes que han sufrido una hemorragia cerebral de magnitud similar a la suya. Actualmente, el marido de Isabel Preysler padece un importante edema cerebral y la mejora de los niveles de consciencia y colaboración se alternan con los de peor estado. El comunicado concluye afirmando que, aunque «no se han presentado complicaciones importantes en la evolución», el estado de Boyer sigue siendo «grave» y se prolongará su estancia en la UCI por tiempo indefinido.
Afección del habla
Desde que los servicios de emergencia le trasladaron a la Rúber por un derrame, Miguel Boyer ha permanecido en la Unidad de Cuidados Intensivos. Al ver que la evolución no era la esperada, el equipo médico dirigido por Pedro Mata decidió intervenirle quirújicamente y se le realizó una «craneotomía y una evacuación del hematoma intraparenquimatoso». En un principio, y dentro de la gravedad de la situación, el resultado de la operación fue positivo. A pesar de todo, se dice que la hemorragia haya afectado al habla y al lado derecho del cuerpo de Boyer, aunque todavía es pronto para conocer en profundidad las consecuencias.
Arropado por su familia desde el primer día
Ni su mujer, Isabel Preysler (en la imagen), ni sus hijas se han separado de Miguel Boyer desde su ingreso. Incluso Tamara Falcó acude con frecuencia a visitarle. La noticia de la intervención de ayer coincidió con las declaraciones de Chábeli, hija de Preysler, en «¡Hola!», en la que presentó a su nueva hija. En dicha entrevista confiesa estar viviendo uno de sus momentos «más dulces» y asegura seguir de cerca la evolución de Boyer. Además, afirma que «viajará a España lo antes posible».
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