Europa

Bruselas

Barroso insta a los líderes de la Eurozona a lograr una solución en la cumbre

El presidente de la CE, José Manuel Durao Barroso, instó hoy a los líderes de la zona del euro a atajar en la cumbre de mañana la crisis de la deuda y la inestabilidad de la moneda única, porque si no toda Europa sufrirá las consecuencias.

"Nadie debe hacerse ilusiones: la situación es muy seria y requiere una respuesta", afirmó Barroso en una declaración a la prensa, en la que afirmó que sin una solución "las consecuencias negativas se sentirán en todos los rincones de Europa y más allá".


La cumbre de mañana en Bruselas está marcada por las diferencias que separan todavía a los líderes de la zona del euro, sobre todo en torno al segundo rescate de Grecia, pero Barroso insistió en que "es hora de decidir"y en que "con buena voluntad por parte de todos podemos lograr una solución mañana". "La situación requiere plena implicación de todos en la cumbre y creo que la habrá", afirmó Barroso.


Los elementos de una solución son conocidos, dado que el Eurogrupo proporcionó la semana pasada "el punto de partida". "Lo mínimo que tenemos que hacer mañana es aportar claridad"sobre ciertas medidas, indicó el presidente de la Comisión Europea.


Esto implica, recalcó, aclarar las medidas que habrá para asegurar la sostenibilidad de las finanzas públicas griegas; la viabilidad y los límites de la participación del sector privado en el segundo rescate a Grecia; el alcance que tendría un fondo de rescate más flexible; la reparación del sector bancario aún es necesaria, y los planes para garantizar la provisión de liquidez al sistema banquero europeo.


Barroso recordó que los países miembros han prometido que harán todo lo que sea necesario para garantizar la estabilidad de la Eurozona y por eso "ahora es el momento de cumplir esa promesa", dado que la mayor parte de las decisiones que tendrán que tomar forma parte de sus competencias y de nadie más. Pero el presidente del Ejecutivo comunitario también apeló a la "responsabilidad del Banco Central Europeo". "Una solución requerirá que todos los actores ejerzan al máximo su responsabilidad", sostuvo.


En este sentido, los líderes deben mañana sentarse a la mesa de negociación con una actitud positiva, "diciendo lo que pueden hacer y lo que quieren hacer y no lo que no harán", insistió.
"Urjo a todos los líderes a mostrar la ética de la responsabilidad europea", enfatizó asimismo.
Barroso reiteró que le interesa a cada Estado miembro comprometerse con una solución.
"Eso es verdad para aquellos que tienen que reducir el déficit y la deuda y eso también es verdad para aquellos a los que se les pide apoyo y solidaridad", apuntaló.


El presidente de la CE también recordó a los países de la zona euro que "somos interdependientes". "Eso no es una opción, es una realidad. En un mundo globalizado, nuestros socios cuentan con Europa, pero sin Europa y la Unión Europea, los europeos no contarán"nada, señaló.


Barroso destacó asimismo que el euro es uno de los grandes activos de la Eurozona y sus ventajas y beneficios superan con creces los esfuerzos que tienen que hacer mañana los estados. "No podemos tomarnos esto a la ligera, si no la historia juzgará a esta generación de líderes con dureza", enfatizó.

La CE por su parte, está cumpliendo con su deber, dijo. "Estamos haciendo todo para acercar posiciones, tanto a través de nuestros contactos políticos como con nuestro conocimiento técnico", señaló Barroso, quien se reúne esta tarde con el primer ministro griego, Yorgos Papandréu, en Bruselas, para preparar la cumbre.