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Viaje con nosotros por Blanca Basiano

La Razón
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Si todavía no tiene claro su destino para estas próximas vacaciones de Semana Santa, le invito a darse un garbeo por este gran parque de atracciones de presunta corrupción llamado España. El pack, cómo no, incluye un completo mapa judicial para no perderse las mejores actuaciones. Porque en este laberinto no es fácil encontrar la entrada de los ERE, Invercaria, un tal Campeón y un instituto Nóos que tiene visos de convertirse en «El Túnel del Terror».

Si tuviera que elegir, pensando en el ambiente que dan unas encendidas elecciones autonómicas y una alegre Feria de Abril, mi elección sería la sevillana con sus ERE y sus variadas ramificaciones. Aunque igual la propuesta es demasiado compleja. Sobre todo si el turista, poco ducho en asuntos judiciales, tiene que ponerse al día en el caso. Otra opción es desplazarse a la capital. Ya se sabe que por esas fechas está muy tranquila y, con un poco de suerte, si uno madruga se librará de hacer colas en el Supremo para ver a alguno de los 40 imputados, incluido el ex ministro Blanco, a los que investigan por presunto cohecho y tráfico de influencias. Y si prefiere la playa, nada mejor que comprar un billete hasta Mallorca para seguir de cerca el show Nóos. Lo de ver al Duque de Palma está complicado. Pero si uno se acerca al juzgado es fácil conocer al otro actor principal, el juez Castro. El mismo que acaba de decir que no se cree la versión de Urdangarin después de 22 horas de duro interrogatorio.

La oferta, como ve, es amplia. Así que reserve plaza no vaya a ser que otro se la robe.