Elián lleva a misa a Raúl Castro

Adolescente, transformado en un «juguete» del régimen, Elián González, el niño que hace una década se salvó milagrosamente de un naufragio en el Estrecho de la Florida, agradeció a Dios haber regresado a Cuba junto a su padre, en una ceremonia religiosa encabezada por el mandatario cubano Raúl Castro.

El joven pupilo es uno de los pocos en la isla capaz de conseguir que Castro vaya a misa. De esta manera el líder revolucionario y Elián ocuparon la primera fila de la Catedral Episcopal de la Santísima Trinidad, en la capital isleña.

Vestido de camiseta a rayas en tonos rojos y pantalón blanco, Elián se abrazó con el mandatario, quien abandonó el verde oliva por una guayabera. También estuvieron el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón; el padre del muchacho, Juan Miguel González; la esposa del mismo y dos hermanitos pequeños.

Pero además de la foto de rigor, el niño balsero habló. En sus primeras declaraciones públicas, Elián González dijo a la Prensa que se siente feliz por haber vuelto a Cuba y agradeció a los pueblos de Cuba y EE UU haber acompañado a su padre en la lucha por devolverlo a su país. «Ésta es la tierra a la que pertenezco y aquí me siento bien», dijo Elián a los periodistas.

«Gracias a la ayuda de una gran parte del pueblo norteamericano y nuestro pueblo, hoy estoy con mi padre y esto es todo para mí», dijo el adolescente que estudia el preuniversitario en su natal Cárdenas, un municipio de la provincia de Matanzas, en el occidente de la Isla.

Cuando le preguntaron por sus parientes en Miami, que trataron de impedir que él regresara junto a su padre, afirmó: «A pesar de que no nos apoyaron en todo (…) no les guardo rencor».

Tenía cinco años cuando le encontraron flotando sobre un neumático en alta mar. Iba con su madre y otros parientes escapando de la isla, pero todos murieron en el intento de llegar a EE UU. Sólo sobrevivió él y fue rescatado.

Comenzó entonces una batalla sin cuartel entre sus familiares de Miami, que querían tenerlo con él allí, y su padre en Cuba. El caso se convirtió en un caballo de batalla entre EE UU y las autoridades cubanas. Fidel Castro llegó a encabezar una campaña mundial para pedir el regreso del niño. Finalmente, Elián volvió a Cuba el 28 de junio de 2000.