Valencia

José Manuel Vela: «Es interesado hacer creer que hemos pedido el rescate»

José Manuel Vela: «Es interesado hacer creer que hemos pedido el rescate»
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VALENCIA- El pasado viernes 20 de julio saltaron todas las alarmas. Tras celebrar la reunión del Consell, el Gobierno valenciano anunció su adhesión al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA). La mayoría de medios de comunicación informaron de que la Generalitat valenciana pedía un rescate, a pesar de que desde el Consell no cesaban los desmentidos a este respecto. El responsable de las cuentas autonómicas explica cuál es la verdadera situación de una de las comunidades que se encuentran en el punto de mira.

–Para que quede claro, ¿ha pedido la Comunidad Valenciana una intervención al Gobierno?
–No. La Comunidad Valenciana no ha pedido absolutamente nada de eso. Estamos asistiendo a una esquizofrenia mediática sin precedentes en este país con este tema. Creo que es un asunto importante, pero que de forma interesada, no quiero pensar que incluso malintencionada, alguien ha querido contaminar y hacer ver que ese mecanismo de liquidez es de rescate, cuando no lo es en absoluto.

–¿Se podría equiparar a los «hispabonos», tan demandados por diversas autonomías?
–Sí, lo que ha hecho el Gobierno de Mariano Rajoy es articular lo que veníamos pidiendo desde hace tanto tiempo, incluso a la ministra Salgado: un fondo para pagar a proveedores, otro para renovar deuda y un mecanismo para poder emitir deuda. La Comunidad se acogió a los dos primeros y ahora se ha acogido al tercero, que es el que va a permitir emitir deuda.

–¿Va a suponer un mayor endeudamiento para la Comunidad?
–Este fondo sólo permite emitir la deuda que el Gobierno valenciano ya tiene autorizada o cualquier otra autonomía, no se está pidiendo ni más deuda, ni dinero. Se trata simplemente de un mecanismo que sustituye a un mercado que hoy está cerrado. Las propias agencias de «rating» han dicho que no es un fondo de rescate, aunque algunos no lo quieren leer. En otros países de Europa hay mecanismos muy parecidos para las regiones.

–¿Va a tener el Gobierno un mayor control de las cuentas valencianas?
–Desde hace bastante tiempo remitimos al Estado toda la información sobre ejecución presupuestaria todos los meses. De todos los datos que se exigen para acogerse al FLA, lo único nuevo es un estado de tesorería, que también lo vamos a remitir. De hecho, la Generalitat valenciana ya envía esta información al diario oficial, incluso toda su ejecución presupuestaria está a disposición del Parlamento valenciano.

–¿Cada cuánto habla usted con el Ministerio de Hacienda?
–De dos a tres veces por semana.

–¿Cómo es su relación con este departamento?
–Muy fluida y basada en la pura lealtad institucional.

–Hay quien dice que se han enfríado las relaciones.
–Para nada. La relación que tenemos con el Ministerio de Hacienda es excelente.

–¿Cree sinceramente que España se va a salvar de la intervención?
–Yo lo que creo es que la situación de España no justifica para nada una prima de riesgo de 640 puntos. La prima española debería moverse en estos momentos en el entorno de los 250-300 puntos. Esto es fruto de un movimiento puramente especulativo, no hay más. Es verdad que en España, en los últimos años, no se han hecho cosas bien en materia de política económica, pero de ahí a que tengamos que estar atravesando esta situación... España no será rescatada, y de esta situación se saldrá poco a poco, ahora bien, nos tenemos que creer Europa.

–¿Usted cree en la teoría de que el Banco Central Europeo compraba deuda española cuando Zapatero era presidente, y ahora no lo hace porque está Rajoy?
–Fíjese qué curioso y qué contrasentido. Cuando Zapatero pedía eurobonos, no estaba pidiendo un rescate; cuando Rajoy pide eurobonos, no está pidiendo un rescate, pero cuando la Comunidad Valenciana se adhiere a un mecanismo, que es lo mismo que los eurobonos pero llamado de otra forma, está pidiendo un rescate. ¿Quién está tergiversando las cosas y por qué? Este mecanismo es un «hispanofondo», que va a permitir que las autonomías que hoy no colocan su deuda ni la renuevan, que son prácticamente todas, lo puedan hacer.