Europa

Barcelona

Carmen una ópera en la frontera

Bieito sitúa la obra de Bizet, que llega al Liceo, entre Ceuta y Marruecos

Mercedes en escena. El barítono Erwin Schrott, que interpreta a Don José, durante los ensayos del Liceo
Mercedes en escena. El barítono Erwin Schrott, que interpreta a Don José, durante los ensayos del Liceolarazon

Carmen regresa al Gran Teatro del Liceo, pero no lo hace como la mítica cigarrera sevillana del siglo XIX. Calixto Bieito se sirve de la gran ópera de Bizet para proponer una lectura del mito como reflexión sobre la cultura de género en la actual frontera de Ceuta con Marruecos. La producción hace casi una década que recorre Europa desde que levantó el telón en el Festival de Peralada en 1999. Si bien el montaje es mucho más grande de como se ha visto hasta ahora, el polémico director teatral no ha hecho muchas variaciones en esta puesta en escena. Bieito explicó a LA RAZÓN que lo que se encontrará el espectador del Liceo es la constatación por una atracción: «Es mi primera ópera grande. Me atrae su música, que encuentro formidable. El acto cuarto es una proeza de síntesis, economía teatral, simplicidad y poder dramático. He ido descubriendo y entendiendo con la puesta en escena el fatalismo, este sentido del destino. Es una ópera que anuncia muchas cosas y caracteres femeninos como serán los de Lulú o Electra, eso grandes papeles que no puedo tratar como mitos porque yo no sabría hacerlo. Necesito personajes de carne y hueso. Carmen es extremadamente urbana y moderna, una de las mejores óperas de la historia».


Cinco repartos
Este espectacular montaje cuenta con la dirección musical de Marc Piollet y hasta tres repartos para las funciones que tendrán lugar ahora, aunque habría que hablar de cinco, puesto que otros dos se encargarán de recuperar «Carmen» en junio. Don José estará interpretado y cantado por Roberto Alagna (por quien Bieito confiesa una empatía especial), Brandon Jovanovich, Neil Schicoff, Fabio Armiliato y Germán Villar, mientras que Carmen se desdoblará en Béatrice Uria-Monzon, Jossie Perez, Anna Caterina Antonacci y María José Montiel. Mención aparte merece la campesina Micaela, que se repartirá entre Marina Poplavskaia, María Bayo, Ainhoa Arteta y Ainhoa Garmendia.

Los cantantes se mueven en una puesta en escena en la que se aprecia el conflicto que se vive hoy en Ceuta, pese a que Bieito, asegura, lo percibió con una década de antelación. La actualidad no le ha hecho retocar una propuesta de máxima actualidad hoy. «No era necesario hacerlo. Ya lo intuimos nosotros, pese a que no éramos muy conscientes en ese momento. Lo que ahora sucede en Francia, en Europa, ya existe en el espectáculo, aunque en las primeras funciones de hace años tal vez el público no lo entendía. Pero se puede leer de esta manera», señala Bieito. En este sentido, el director y su equipo buscaron inspiración para su «Carmen» en un viaje por el sur, especialmente por Málaga: «Nos dimos cuenta de que aquello no funcionaba y decidimos viajar más hacia el sur, a Tánger. Al volver pasamos por Ceuta, por la frontera. Allí descubrimos la idea de Carmen-frontera. Cuando abordas estos grandes títulos es importante saber qué quiere decir Carmen, Lulú y Electra. Carmen es frontera, es fatalismo del destino y de la muerte», apuntó el responsable de esta puesta en escena. Por eso, Bieito cree que la heroína de Bizet puede encontrarse, por ejemplo, en una obra aparentemente insólita como «Riding with the death», una pieza de Basquiat pintada pocos meses antes de morir y protagonizada por un personaje –tal vez el propio artista– a caballo de un esqueleto.

Es innegable que existe expectación en el coliseo barcelonés por ver la propuesta de Bieito. El público del patio de butacas nunca ha sido indiferente a las producciones del director y la controversia parece inherente a sus montajes. Elementos como una espectacular bandera española en el cuartel de la Guardia Civil de Don José, con un telón en el que se lee «Todo por la Patria», o un grandioso toro de Osborne que preside la escena podrían verse como provocaciones, especialmente para el espectador catalán, con el debate sobre la prohibición de los toros muy caliente. A Bieito no le espantan las opiniones adversas: «No pienso en el público. Lo que quiero es gustar, que les guste y que compartan conmigo lo que ha disfrutado el público de media Europa, donde hemos tenido elogios impresionantes. Todas las opiniones han sido increíbles. Espero que disfruten. Después de ver el acto cuarto –que estárealizado con una enorme simplicidad– y a los cantantes, capaces de proezas alucinantes, espero que no se queden con anécdotas. Estaba contento con el concepto. Estoy en contra de las prohibiciones y ya he sido muy claro en esto, pese a no ser taurino», concluye Calixto Bieito.


El detalle
EL «NON-STOP» DE BIEITO
En sus manos tiene Bieito (en la imagen) cinco proyectos: a Suiza llevará una «Aida», mientras que «La vida es sueño» se podrá ver en el bonaerense Teatro San Martín. «Voces» recalará en Bergen, y en Alemania presentará «Pasifal» y «Le Gran Macabre».


- DÓNDE: Gran Teatro del Liceo. Barcelona.
- CUÁNDO: Desde el 27 de septiembre.
- información: Tel.: 93 485 99 00