Virginia Tech revive su pesadilla

NUEVA YORK- El director de servicios a los estudiantes atletas de la Universidad Politécnica de Virginia, Jermaine Holmes, envió ayer por la tarde un mensaje que pensaba que no iba a tener que mandar nunca después de la tragedia vivida en 2007, cuando un estudiante mató a 32 personas antes de quitarse la vida: «Permaneced dentro. En un lugar seguro. Es frente a nuestro edificio en el aparcamiento. Y no parece que sea un tiroteo al azar», explicó ayer Holmes en un mensaje colectivo a sus estudiantes después de que alguien disparase a un oficial de Policía y se informase de una segunda víctima.

Tras el tiroteo, se publicó en la página web de la universidad que el sospechoso había sido visto por última vez en McComas Hall, el gimnasio mayor del campus, a dos manzanas del estadio Lane de la Universidad. Según el mensaje de alerta, «poco después del mediodía de hoy, un oficial de Policía de Virginia Tech paró un vehículo durante un control rutinario de tráfico en el aparcamiento Coliseum, cerca de McComas Hall. Durante el mismo, el agente fue disparado y asesinado. Hubo varios testigos del tiroteo, que dieron cuenta a la Policía de lo sucedido. El tirador abandonó a pie el lugar con dirección al aparcamiento Cage, donde se encontró a otra persona que también ha muerto», explicó el comunicado. En la misma nota, se describió al sospechoso como un hombre blanco con pantalones grises de deporte y gorro verde, el cual llevaba una mochila. Los agentes acordonaron la zona, la cual se llenó inmediatamente de agentes de seguridad. El propio Holmes indicó que se sorprendió de la efectividad del sistema de alerta del campus, el más avanzado del país, instalado después de que Cheung-Hui Cho, estudiante de la licenciatura de inglés de la Universidad, la emprendiese a tiros con sus compañeros en 2007.

A primera hora de la tarde, la Policía del Estado de Virginia, que se puso al frente de la investigación, dio orden de que se vaciasen los edificios del mismo centro universitario mientras empezaban la operación de búsqueda del sospechoso. Al cierre de esta edición se supo que el segundo fallecido era el autor del tiroteo. La Policía no informó de si el sospechoso se suicidó o fue abatido por otra persona.

Este tiroteo se produjo precisamente el mismo día en que la Universidad Politécnica de Virginia había apelado una multa de 55.000 dólares del departamento de Educación, relacionada con la respuesta del centro a la tragedia de 2007. Entonces, Cheung-Hui Cho, de 23 años, fue el autor de la mayor masacre de la historia moderna de Estados Unidos perpetrada por un único tirador. En dos ataques separados, el joven, nacido en Seúl, arrebató la vida a 32 personas e hirió a otras 25 antes de suicidarse.