Bruselas

El poderoso

La Razón
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A partir de hoy, y durante dos jornadas, Rubalcaba concentrará casi todo el poder en sus manos. Será presidente del Gobierno en funciones, vicepresidente primero, ministro del Interior, portavoz y, por qué no decirlo, propagandista mayor del Reino. Ello se debe a que Zapatero se marcha a Bruselas para participar en la Cumbre Europea. Me temo que esta situación, la de Rubalcaba como presidente en funciones, se va a repetir con frecuencia en los próximos meses, cada vez que el actual inquilino de La Moncloa se desplace al exterior, como, por ejemplo, a la Cumbre del G-20, a mediados de noviembre, o a Argentina unas semanas más tarde para acudir a la Cumbre Iberoamericana. De momento, mañana viernes el «todopoderoso» presentará de forma clara sus credenciales, presidiendo la reunión del Consejo de Ministros. No seré yo el que sospeche de su valía, que está fuera de toda duda, por algo ha llegado a donde ha llegado. Más bien todo lo contrario. Ya lo demostró ayer en el Congreso de los Diputados, aguantando los empellones del PP a cuenta de su pasado, tanto el lejano como el más cercano. En los próximos meses vamos a asistir a un espectáculo apasionante, aunque no sé si edificante, con Rubalcaba en campaña contra el PP para erosionar la ventaja electoral de éstos e intentar equilibrar los pronósticos, y con los populares concentrando una gran parte de su artillería sobre este personaje con fama de tenebroso. Sin embargo, eso no nos debe hacer olvidar que los problemas de la gente de a pie siguen ahí: el paro, el euribor que sube (ojo con esto), el desparrame territorial, el aumento de los desahucios... Rubalcaba es poderoso, pero ¿tanto como para arreglarlos?