Barcelona

Los recortes ponen en jaque el futuro de las universidades

Las relaciones entre el personal y la gerencia de centros como la UPC y la UAB son más que tensas

Los recortes ponen en jaque el futuro de las universidades
Los recortes ponen en jaque el futuro de las universidadeslarazon

BARCELONA- Conseguir mantener el liderazgo en los ranking estatales e internacionales pese a los recortes presupuestarios. Perpetrar el mantra que la secretaria de Universidades quiere imponer a toda costa a los siete centros de educación superior catalanes públicos no está siendo una tarea fácil. El Govern quiere acabar con el déficit y las universidades litigan con las filas docentes y de personal para sanear las cuentas.
El mayor varapalo llegó en el presupuesto de 2011, cuando el recorte de la Generalitat, –que ascendía a un 16 por ciento y suponía un recorte de 144 millones de euros, que se debían sumar a los 154 que dejó a deber el tripartito­–, alzó las críticas entre los rectores. Este año los centros han respirado semialiviados al comprobar que el recorte de 2012 se queda entre un 2 y un 4 por ciento, pasando de los 927 millones a 918 millones, una cifra que vuelve a incidir en las cuentas de los centros.
Mientras la Universitat de Barcelona (UB) se mantiene a flote sin apenas despidos y reduciendo la jornada lectiva de los docentes, en la Universitat Autònoma (UAB) y la Politècnica (UPC), las tensas relaciones entre personal y gerencia impiden un clima propicio para solventar pacíficamente las trabas económicas. Estos dos últimos, además, son los que más dificultades están teniendo para acabar con su deuda.

Elecciones anticipadas
La Autònoma es la que más se ha apretado el cinturón. En 2012 contará con 24 millones menos, es decir, tendrá que hacer con 298 millones lo que ha hecho este curso con 322. Todo, en un clima de gobierno «insostenible» ya que sólo en recortes de personal la universidad quiere ahorrar 10,5 millones. La rectora, Anna Ripoll, ha tenido que adelantar las elecciones al rectorado al mes de mayo después de que el claustro rechazase su informe anual, y el Govern casi le impone un interventor a la fuerza para que fiscalice sus cuentas de una vez.
«El equipo de gobierno, si es que esto existe, –porque ya todo el mundo va por su lado y la Rectora es la única que se resiste a anunciar la fecha de las elecciones– quiere hacer aprobar un plan de recortes del personal de Investigación (PDI) que podría suponer el despido de hasta 130 profesores», lamentan desde CCOO. Aunque la universidad insiste en que «hay liquidez para pagar las nóminas», los trabajadores sólo ingresaron en septiembre el 60 por ciento de la subvención de la Generalitat y les han dejado a deber más de 4 millones de euros. En noviembre sólo les ingresaron un 70 por ciento. El resto de meses han ingresado el total, el último día del mes. La Generalitat dijo que a 31 de diciembre se pondría al día y no lo ha cumplido. «No hay interlocución entre trabajadores, gerencia y Govern, las relaciones están muy crispadas», lamentan los sindicatos.

Crispación
En la Universitat Politécnica el clima de crispación no difiere. Delegados sindicales del centro se sumaron a los encierros educativos del pasado jueves y exigieron poner fin al plan de viabilidad que plantea el rectorado. «Quieren rescindir el contrato de 200 personas en un año y medio mientras en gerencia, entre once personas, cobran más de un millón de euros anuales. ¿Quién tiene los salarios inflados?», lamenta una de las delegadas sindicales. El centro sólo pudo ahorrar en 2011 8,5 millones de los más de 37,8 recortados por el Govern, y cerró 2011 con unas previsiones de déficit de entre 18 y 20 millones. Los trabajadores exigen la dimisión del rector, Antoni Giró, y el centro ha decidido prorrogar el presupuesto, al igual que la Universitat Rovira i Virgili (URV) de Tarragona, a la espera del recorte del Gobierno central.
Con todo, el personal que más se resentirá por el descenso presupuestario será el profesor asociado y los sindicatos denuncian que «se está atacando a la figura más débil de la comunidad universitaria».
La secretaria de Universidades, por su parte, trata de rebajar tensiones ante la inminente huelga universitaria del 29 de marzo y alude a la presentación en el próximo mes de marzo de un plan para captar talento en la docencia universitaria. Una hoja de ruta en la que está previsto no sustituir completamente las 2.500 jubilaciones de profesores de los próximos años, aunque «se exprimirá al máximo» la calidad de los nuevos docentes. «Calidad por encima de cantidad» plantea Universitats. Buena prueba de ello han sido el rediseño del mapa de postgrados y másters. Se ha pasado de los 580 másters programados a 450.