Metro demanda a los sindicatos para declarar «ilegal» la huelga salvaje

Madrid- Aún colean las consecuencias de la huelga salvaje que los trabajadores de Metro llevaron a cabo el pasado verano y que dejó, durante dos jornadas completas, a los usuarios de este transporte público sin opciones al incumplir los servicios mínimos. A mediados de julio, tras más de un mes de conflicto, empresa y sindicatos llegaron finalmente a un acuerdo para poner un punto y final a los que, de momento, han sido los últimos paros realizados por la plantilla de Metro. Desde entonces ambas partes han estado negociando, pero no sobre las condiciones laborales por las que lucharon los trabajadores, sino por las consecuencias que tendrá el incumplimiento de los mínimos.
Ahora la empresa da un paso más y, según ha podido saber LA RAZÓN, Metro de Madrid ha presentado una demanda ante los Juzgados de lo Social de Madrid contra el comité de huelga, el comité de empresa y los sindicatos convocantes de la última huelga en el suburbano para que se reconozca la ilegalidad de la huelga llevada a cabo el 29 y 30, los días en que las instalaciones de la empresa pública permanecieron cerradas y sin actividad alguna.
La intención de los responsables de Metro es que la Justicia declare que los paros salvajes de estas dos jornadas fueron «ilegales» e «ilícitos». Asimismo, consideran «abusivo» que fueran los representantes sindicales quienes incitasen al resto de la plantilla a inclumplir los servicios mínimos. En concreto, la demanda de Metro de Madrid se ha dirigido a los cinco sindicatos que convocaron la huelga (Sindicato de Conductores, CC OO, UGT, Solidaridad Obrera y Sindicato Libre), contra los diez miembros que componían el Comité de Huelga y contra el comité de empresa.
Tras el acuerdo laboral, la empresa interpuso una demanda de conciliación contra los cinco sindicatos que ahora denuncia y también contra los miembros del comité. Para llegar a un acuerdo les solicitaba 6,5 millones de euros de indemnización por daños y perjuicios durante los días de paros sin servicios mínimos. A pesar de los intentos de ambas partes por llegar a un entendimiento antes de ponerse en manos de la Justicia, finalmente no se produjo acuerdo en el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación de la Comunidad de Madrid.
«No les va a salir gratis»
Hace meses que los responsables del Ejecutivo regional aseguraron que estos paros no iban «a salir gratis» para los sindicatos. A fin de cuentas, han reiterado en varias ocasiones los consejeros del Gobierno autonómico y la propia presidenta regional, Esperanza Aguirre, esta acción «es una consecuencia del incumplimiento de la ley».
La huelga del verano finalizó con rebajas del uno por ciento en los sueldos de todos los empleados y recortes de otras partidas destinadas por la compañía a «gastos de personal». Para llegar a este acuerdo los viajeros de Metro tuvieron que soportar cinco jornadas de paros parciales y dos días de huelga total en los que se paralizó la capital y se vivieron situaciones de mucha tensión y agresividad incluso entre los propios empleados de la empresa de transporte. Ahora, al margen de esta demanda, empresa y sindicatos han dado carpetazo al conflicto laboral y no se espera, por el momento, que esta medida pueda provocar nuevos paros en el suburbano de la Comunidad de Madrid.

Los expedientes siguen su curso
- Al margen de la demanda judicial, los empleados de Metro que secundaron la huelga salvaje se enfrentan también a posibles expedientes sancionadores por incumplimiento de sus labores. Las últimas noticias desde la empresa aseguran que la tramitación de estas amonestaciones, que podrían afectar a unos 900 empleados y acabar en algunos casos hasta en despido, siguen su curso. Se trata de un asunto que la dirección de Metro aún está negociando aún hoy, cuando han transcurrido cuatro meses desde que los empleados hicieron la huelga.