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Lucha contra el fraude fiscal

La Razón
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El Ejecutivo continuó ayer su «hoja de ruta» hacia la reducción del déficit público del 8% del PIB aflorado en el ejercicio pasado. Después de decidir el viernes pasado un recorte del gasto público de 8.900 millones y un alza de los ingresos de más de 6.000 millones con la subida de impuestos, ayer sentó las bases para poner coto a la evasión fiscal. El ministro de Hacienda presentó al resto del Gabinete de Rajoy las directrices del futuro Plan General de Control Tributario de 2012, con el que espera recaudar 8.171 millones este año. Para ello, introducirá modificaciones en el sistema, como la limitación del pago en efectivo a partir de determinadas cantidades en transacciones económicas, a imagen y semejanza de la legislación de países como Francia e Italia. Al término del Consejo de Ministros, la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, consideró que esta medida puede ser un elemento «muy clarificador» para detectar «grandes bolsas» de fraude y de economía sumergida. El plan contra la evasión fiscal pivotará sobre la comprobación e investigación del fraude fiscal, control del mismo en fase recaudatoria y colaboración con las autonomías. Se introduce como elemento novedoso la explotación de la información proporcionada ex novo por países que ya no son paraísos fiscales tras la firma de convenios. En ese sentido, Sáenz de Santamaría calificó de extraordinaria relevancia en la lucha contra el fraude la información de países como Andorra, Panamá, Bahamas o Antillas Holandesas. En el combate contra la economía sumergida se reforzarán los mecanismos de colaboración con la Inspección de Trabajo y la Seguridad Social. Por primera vez, se explotará informaciones obtenidas del consumo de energía eléctrica, terminales de tarjetas de crédito... Además, se adelantará la intervención de los órganos de recaudación al inicio de los procedimientos de gestión tributaria y se reforzará la Vigilancia Aduanera. Se fomentará el cumplimiento voluntario, mediante la autocorrección de incidencias censales y de errores... Se trata de que los «pequeños contribuyentes» comuniquen directamente al Fisco si han incurrido en algún «error». Así se evitará el inicio de un procedimiento sancionador y la investigación se podrá centrar en los grandes fraudes.