Barcelona

«El PP puede ser partido de gobierno en Cataluña»

Sánchez-Camacho llama a los ciudadanos a evitar otro tripartito o un ejecutivo soberanista 

«El PP puede ser partido de gobierno en Cataluña»
«El PP puede ser partido de gobierno en Cataluña»larazon

El PP es antónimo del PSC. Sus discursos no coinciden casi nunca, por no decir nunca, pero ayer se dio la excepción que confirma la regla. Alicia Sánchez-Camacho compartió con José Montilla una idea, que las próximas elecciones catalanas son «trascendentes». Montilla dijo que la cita del 28 de noviembre «marcará el destino de una generación» y la presidenta del PP catalán no se quedó atrás, la calificó de «extraordinaria» e «histórica». El PP cree que es una oportunidad única para «superar el alejamiento, el descrédito y la desafección de los catalanes hacia la clase política».

Las divergencias
En lo que ya no coincide con el presidente de la Generalitat es en que Cataluña necesita un cambio «urgente», en que el tripartito de Montilla «ha fracasado» y en que «un tercer tripartito sería fatal para Cataluña». Aunque para el PP catalán, también sería un error «un tripartito de CiU con independentistas, una mayoría absoluta de CiU o un gobierno sociovergente». Sánchez-Camacho calificó esta última fórmula –la sociovergencia– como un «acuerdo de poder».

Sin tripartito ni gobierno nacionalista, la opción correcta pasaría por que el PP se convierta en partido decisivo. Y para conseguirlo, Sánchez-Camacho llamó a los catalanes a acudir «masivamente» a las urnas». Les dio varios motivos para animarlos, el más importante, que «el cambio en España, se iniciará en Cataluña».

En el Partido Popular confían en que si el PSC cae en Cataluña y el PP logra ser decisivo en la Generalitat, José Luis Rodríguez Zapatero caerá detrás del PSC. No descartan que un cambio de gobierno en Cataluña provoque un avance de elecciones en España.

Para seducir al electorado, Sánchez-Camacho subrayó la idea de que el PP es sinónimo de moderación. Insistió en que si el tripartito ha fracasado es porque «se ha sumergido en debates identitarios sin pensar en los catalanes» y acusó a Montilla de estar más pendiente de agotar los plazos por interés partidista, que de solucionar los problemas reales.