Murcia

OPINIÓN: Mouriño

La Razón
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Desde que Mouriño apareció por la Liga española, se han alcanzado dos grandes logros: que la imagen de nuestro fútbol sea la de una taberna maloliente y que los jugadores de la Selección campeona del mundo no se hablen. Lo mismo es que alguien nos ha mandado malintencionadamente a este tipo faltón, con el innoble objetivo de destrozar por fuera, lo que es invencible en el terreno de juego. Es una pena que para una vez que tenemos un grupo maravilloso de jugadores -todos ricos además- aparezca un tipejo extraño con la filosofía más barriobajera que he visto y convierta cada partido en una riña carcelaria. Y si todavía hay gente que piensa que Mouriño es un ser inteligente por el ruido que mete, yo no veo mas que a un imbécil, pidiendo perdón por adelantado a los verdaderos imbéciles, por incluir a este individuo en su categoría. Mouriño debería desaparecer del fútbol español. Ahora mismo. Ya. Hace cinco minutos. Nada nos aporta un broncas, un chulete de salón que ataca por la espalda y le mete el dedo en el ojo al contrario aprovechando el tumulto. Si quiere pelea, debería por lo menos ponerse delante de su enemigo. Pero como tiene muy mal perder, primero provoca y luego abandona al Madrid en medio de la riña, y no tiene pudor en cargarse la imagen de un equipo señor y cepillarse el sentimiento de todos los que nacimos blancos. Mouriño no cabe en la colecciòn de los que guardamos los cromos de Del Bosque, Laudrupp, Butragueño, Raúl, Velazquez o Zidane como señas de identidad deportiva y humana. Que haya alivio y sálvese el que pueda.