El año que iba a acabar con empleo neto cierra con 65153 nuevos parados

SEVILLA- Las previsiones de empleo de la Junta para 2011 –no hay ninguna estimación para este año– han saltado por los aires. El objetivo era cerrar el año creando empleo neto y aumentar el número de ocupados en 24.000, con lo que 2011 cerraría con 2.899.000 personas trabajando. Los últimos datos del Inem conocidos van en otra dirección. El número de parados aumentó en 65.153 personas en el último año, un 7,2 por ciento, con lo que la comunidad cuenta con 969.152 personas sin trabajo, a los que habría que añadir eventuales agrarios o los que reciben cursos de formación, que no aparecen en la lista oficial. Los demandantes de empleo no ocupados ascienden a 1.129.014.

El número de afiliados a la Seguridad Social (2.841.260) se sitúa muy por debajo del larguero previsto por el Ejecutivo de José Antonio Griñán. Pese al aumento de 17.992 ocupados en el mes de diciembre (un 0,64 por ciento), en el último año se han perdido 33.971, un 1,18 por ciento.

Diciembre no ha sido un mal mes para Andalucía. La región encabezó la bajada del paro con 13.325 personas (un 1,36 por ciento) mientras que subió ligeramente a nivel nacional, un 0,04 por ciento. Sin embargo, la tan anunciada por Griñán «rampa de salida» de la crisis no se vislumbra por ninguna parte. Los 65.153 parados más de 2011 distan mucho de los 208.561 de 2008, el peor año de la crisis económica, o de los 132.115 de 2009. Pero superan en más de 10.000 los registrados el año pasado, que cerró con 52.506 personas más en el paro. Aquí es donde reside el problema. De 2012 sólo se sabe que será peor laboralmente que 2011 y que aglutina serios nubarrones de recesión económica.

Por sectores, el paro registrado en diciembre, en relación con el mes anterior, aumentó especialmente en el sector de la Construcción, con 3.280 desempleados más hasta los 201.044 desempleados, y en Industria, con 670 nuevos desempleados, hasta 82.585 parados; mientras que en el resto de sectores descendió, especialmente en el sector Servicios, con 8.452 desempleados menos, hasta los 499.585; y Agricultura, donde el paro descendió en 4.645 desempleados, hasta los 46.834. El Colectivo Sin Empleo Anterior también registró un descenso de 4.178 desempleados, hasta los 139.104. En la Construcción se ha frenado la destrucción de empleo, pero no se ha acabado la sangría: hay 5.025 parados más que hace un año. De los más de 380.000 contratos, el 80% son temporales.

Por provincias, el desempleo registrado en el Inem subió en diciembre en cuatro provincias: Sevilla (0,54 por ciento); Cádiz (0,11 por ciento); Málaga (0,10 por ciento) y Huelva (0,63). Por el contrario, Jaén encabezó la bajada, con 8.868 personas, un -15,46 por ciento, debido fundamentalmente a la campaña de la aceituna; un 3,72 por ciento descendió en Granada; un 2,17 en Córdoba; y un 1,14 por ciento en Almería. En términos interanuales, la mayor subida se produjo en la provincia granadina, con 8.889 desempleados más (un 9,96 por ciento); y la menor la registró Almería (3,96 por ciento). El secretario general de CC OO-A, Francisco Carbonero, consideró «algo coyuntural» la bajada del paro en diciembre. Aludió a «la estacionalidad del sector Servicios y al inicio de las campañas grícolas, junto a los efectos de aspectos puntuales como el Plan OLA», de obra pública. Por su parte, la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) recordó que «ninguno de los principales sectores productivos ha podido crear empleo». La patronal confía en que las medidas que se tomen en los próximos días den un «giro definitivo hacia la creación de empleo».

Y Griñán ya avisa de que enero será un «mes malo»
El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, afirmó ayer que el descenso del paro en diciembre «sirve como consolación, pero poca consolación» ante el dato «absolutamente obvio» por el que el paro sigue siendo el «principal problema» de la región. El máximo mandatario andaluz ya avisó de que no se esperan brotes verdes en los próximos meses: «Enero no será bueno, porque enero tradicionalmente es un mes malo», ya que coincide el final de contrataciones en el Sector Servicios y del final de la campaña de la aceituna.