Andalucía

Cuatro debates más que en 2007 y no son suficientes

A los tres debates que ya se han producido –el de las redes sociales en el edificio CREA, en Giralda TV y el del pasado viernes en la Cadena Ser– hay que sumarle otros tantos que ya están confirmados para lo que resta de campaña: en RNE, en TVE y, de nuevo, en la televisión local.

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En seis ocasiones, pues, se habrán encontrado los candidatos cuando llegue el próximo día 22, pero para el socialista Juan Espadas aún no es suficiente. Quiere más. Ayer, el alcaldable volvió a insistir en su invitación «al candidato del PP a que acepte un debate en la televisión pública de Andalucía, como capital de la comunidad. No vamos a renunciar a ello hasta el último día», amenazó.

Asimismo, criticó a Juan Ignacio Zoido por «la espantada del debate propuesto para esta mañana (por ayer)» y añadió que «es una falta de respeto que por estrategia se esté esperando si iba alguien al debate». «No es normal no recibir preguntas como hace el PP –a nivel nacional, no local–, lo que ha motivado la creación de una plataforma de periodistas», denunció Espadas, instando al alcaldable popular a «dar la cara, en los debates, por ejemplo, como una forma de explicar las propuestas y que los ciudadanos sepan que las agendas son públicas y no ocultas».
En la misma línea, José Antonio Viera, secretario provincial de los socialistas, calificó el supuesto rechazo de Zoido a mantener un cara a cara con Espadas como «un fraude». «Que dé la cara, que diga qué Sevilla quiere», le demandó.

El aspirante del PP, ante los insistentes requerimientos, le recordó a los socialistas las citas que ya se han producido y las que están por venir para asegurar que, aunque guarda el «máximo respeto» al PSOE y a su candidato, «no sé que es lo que quiere». «Lo que no puede es impedir que yo esté en la calle», sentenció. Por su parte, el tercero en discordia, Antonio Rodrigo Torrijos, el candidato de IU, repudiado en los últimos días por Espadas y «excluido» en el último debate, aseguró ayer que al socialista «le falta inteligencia política para administrar los tiempos».