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Pierde la batalla

La Razón
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La unanimidad, afortunadamente, presidió ayer el Pleno del Consejo General del Poder Judicial al apartar de sus labores jurisdiccionales al juez Garzón al existir un procedimiento contra él por delitos cometidos en el ejercicio de sus funciones. El titular del juzgado número 5 perdía así la carrera emprendida para llegar a la Corte Internacional de la Haya antes de que el Consejo se pronunciara sobre su separación de la Audiencia Nacional. Y eso que ha contado con la colaboración de instancias gubernamentales que con gran celeridad realizaron todos los informes favorables, necesarios para tal fin. Al juez estrella le ha salido mal su última estratagema para darse más prisa que Varela, al que había recusado por considerarle parcial. El juez del Supremo aceleró los plazos al ordenar la apertura de juicio oral por presunta prevaricación en su investigación del franquismo, lo que le ha obligado a abandonar la Audiencia. Algunos miembros del Gobierno y otros dirigentes socialistas quisieron dejar claro que al juez le asiste la presunción de inocencia «porque el procedimiento contra él no ha concluido». No estaría mal que este principio, veraz donde los haya, se lo aplicaran estas mismas personas a otros encausados ajenos a su ideología. Y sobre todo, lo que deberían hacer es dejar trabajar en paz a la Justicia, sin presionarla para que absuelva a Garzón o condene a quienes no son afines.