El PSOE dará la batalla para que el carbón tenga futuro más allá de 2018

El PSOE de Castilla y León arranca el año con fuerza, y con el carbón como tema estrella. Los socialistas de esta Comunidad, con su líder, Óscar López, a la cabeza, se reunieron ayer en Valladolid con los alcaldes de las zonas mineras de la Región, para analizar y debatir la situación en la que se encuentra este sector pero también para hablar de su futuro y poner propuestas encima de la mesa.

El futuro del sector del carbón está limitado, pero es algo más halagüeño que hace cuatro meses, según explicaba López, quien volvía a dar su palabra de que los socialistas darán la batalla hasta el final, para lograr que la minería tenga futuro en nuestra Comunidad más allá de 2018, que es el año fijado por la Unión Europea para dar por finalizadas las ayudas a las cuencas mineras que no son rentables.

El secretario regional del PSOE es un firme defensor del carbón y del proyecto de captura del CO2 que está en marcha en Ponferrada, pero, además, apuesta por reactivar las cuencas mineras de León y Palencia así como por reorientar las ayudas que reciban en proyectos que generan riqueza y empleo. Aún así, López insistía en que en esta lucha están ellos solos, y cargaba contra el PP, al que acusaba de torpedear el Real Decreto del Carbón, con el recurso planteado por la Xunta de Galicia que, de momento, ha salvado el Tribunal Supremo, pero que aún debe pasar el filtro del Tribunal Europeo en Luxemburgo. Y advertía de que si Rajoy es presidente en 2012 «el carbón será historia».

Las ayudas, pronto

Los socialistas son optimistas al respecto y confían en que el próximo 10 de enero el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dará la razón a España en su normativa sobre el carbón nacional, con lo que podrán adelantar en los próximos días las ayudas a las empresas mineras. Unas empresas que no atraviesan por su mejor momento, como es el caso de la Hullera Vasco Leonesa, inmersa en un expediente de regulación de empleo de seis meses que afecta a 471 de sus 523 empleados, a los que hay que sumar los dos mil trabajadores que viven pendientes de un hilo en el Grupo Alonso.

Desde el PSOE confían asimismo en que las compañías eléctricas retirarán también su recurso planteado al canón impuesto por la compra de carbón autóctono para sus centrales térmicas.

Al hilo de esto, el director general de Energía del Gobierno de España, Antonio Hernández, presente también en la reunión de ayer, destacó el esfuerzo que está realizando el Gobierno de Zapatero para adelantar el dinero a las empresas mineras para que tengan liquidez y puedan pagar las nóminas. «España no puede permitirse cerrar plantas de carbón autóctono porque necesita una reserva energética y estratégica», señaló Hernández, tras insistir en que desde el Gobierno de Zapatero no tirarán la toalla hasta no conseguir que las cuencas mineras de España tengan futuro .