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Navarro cosecha más apoyos y sale al paso de Ros

El alcalde de Terrassa y aspirante a primer secretario del PSC, Pere Navarro, negó ayer que el congreso esté «controlado»
El alcalde de Terrassa y aspirante a primer secretario del PSC, Pere Navarro, negó ayer que el congreso esté «controlado»larazon

Barcelona- El debate previo al congreso del PSC transcurría, hasta ahora, con guante blanco, pero conforme se aproxima la cita del cónclave los mensajes entre candidatos son cada vez más contundentes. Al alcalde de Terrassa y favorito para imponerse como primer secretario, Pere Navarro, le sulfura que se le cuelgue la etiqueta de ser el candidato oficioso del actual aparato del PSC y, ayer, al escuchar esta acusación por boca de uno de sus rivales –el alcalde de Lleida, Àngel Ros– salió a su paso negando que el congreso esté controlado.

Navarro ha hecho todos los esfuerzos posibles para ahuyentar la idea de que es un hombre colocado por el todopoderoso secretario de Organización del PSC, José Zaragoza, para tomar el relevo de José Montilla. Insiste en que su paso adelante para dirigir el partido ha sido fruto del diálogo con la militancia y con diversos cuadros del partido. Pero Ros no alberga dudas de que Navarro es el favorito de la dirección y así lo está repitiendo en los últimas días. Con esta estrategia aspira a presentarse como el verdadero candidato de la renovación del PSC. Además, confía en lograr una alianza con el otro candidato de perfil más catalanista, el «obiolista» Joan Ignasi Elena, y así multiplicar sus posibilidades en la votación de los 830 delegados.

Convicciones catalanistas

La otra estrategia de Ros consiste en abanderar el catalanismo para posibilitar que el PSC compita de tú a tú con CiU. Esto última también irrita a Navarro porque asegura sentirse tan catalanista como su adversario. «El catalanismo forma parte de mis más absolutas convicciones (...) En esto ni me acomplejarán ni me ganarán», dijo el alcalde de Terrasa en un artículo en su blog.

Al fin y al cabo, el viraje más tangible que pueda hacer el partido hacia posiciones más catalanistas ya está prácticamente acordado después de la propuesta de enmienda que pactaron Ros y el alcalde de Sabadell, Manuel Bustos. Ambos acordaron que el PSC tiene que poder desmarcarse del PSOE en el Congreso en temas especialmente importantes para Cataluña y la gran mayoría del partido comparte este planteamiento.

Entre tanto, el alcalde de Terrassa continúa cosechando apoyos. Ya tenía el respaldo mayoritario de la federación del PSC de Barcelona y el de alcaldes como Josep Fèlix Ballesteros (Tarragona) y Núria Parlon. A estos valiosos apoyos se sumó ayer el de una cuarentena de cuadros del PSC que rondan los 40 años y representan la nueva generación del partido que se va abriendo paso con determinación. Diputados como Rocío Martínez Sampere, Jaume Collboni, Consol Prados, Eva Granados y Francesc Vallès, entre otros, le expresaron su respaldo y le hicieron entrega de un documento que lleva por título «Compromiso por el cambio».

Navarro agradeció su aportación y aprovechó para manifestar, de nuevo, su irritación con Ros. «Yo no creo en esta voluntad de crear familias en el partido. Lo que yo percibo es más bien una síntesis de todo esto», analizó el alcalde de Terrassa.