Consejo de Ministros
Los dietistas no avalan los menús de Sanidad
Los expertos desaparecen del documento que veta las máquinas de «vending» en las escuelas
MADRID- El Ministerio de Sanidad, y más concretamente la Agencia de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), elaboró lo que ellos mismos denominan un «documento de consenso» con las recomendaciones sobre la alimentación en los centros escolares. Dicho informe contaba, según la propia Agencia, con el aval de diferentes expertos, entre ellos la Fesnad (Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética), que reúne a especialistas de los diferentes ámbitos desde los que se puede abordar la nutrición.
La polémica siempre rodeó a esta iniciativa que pretende, entre otras cosas, retirar las máquinas con productos alimenticios de los colegios. Ahora, cuando la ministra anunció esta misma semana que la presentará para su aprobación en Consejo de Ministros el próximo mes de septiembre, los expertos de la Fesnad abandonan su papel de avalistas de dichas recomendaciones. En la propia página web de la Aesan se podía ver, el 26 de julio pasado, por ejemplo, cómo, entre los expertos colaboradores en la elaboración del documento, mencionaban a la citada federación. Pocos días después, dicha mención había desaparecido. Sin más, sin explicaciones.
Necesario
No es que los especialistas crean que es negativo, no. Piensan que la educación en nutrición es necesaria «y este documento recoge inquietudes que hemos mostrado en materia de nutrición durante mucho tiempo», según Javier Aranceta, presidente de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC). Todos los expertos consultados por LA RAZÓN coinciden con Aranceta en la necesidad de unas pautas nutricionales para los niños, pero «no hemos firmado nada, ningún acuerdo ni nada similar con la Aesan», explica un portavoz de una de las Sociedades que conforman la Fesnad.
Acusan a la Agencia de no haber convocado una reunión formal con ellos, sino de aprovechar que todos ellos se encontraban en el congreso de la Fesnad y, allí, comentarles que quería ver con ellos un documento que se iba a redactar sobre esta materia.
En aquel momento, se ofrecieron opiniones, pero «no hicieron ni caso». El documento en cuestión se presentó al Consejo Interterritorial para su aprobación por los consejeros de Sanidad de las diferentes comunidades autónomas el 21 de julio, lo que algunos definen como con «nocturnidad y alevosía».
Deprisa, deprisa
Todo indica, y así lo ven los nutricionistas y médicos con los que ha contactado LA RAZÓN, que el auténtico objetivo del Ministerio de Sanidad era la aprobación de la iniciativa. De ahí que lo que verdaderamente le importa era presentarlo al Interterritorial. «Parece que como tiene problemas para sacar adelante la prohibición del tabaco, ha decidido dedicarse a esto en cuerpo y alma», indican.
En vista de que había sido aprobado por las comunidades autónomas, la Fesnad se dirigió a la Aesan para expresar su descontento y ofrecer las ideas de sus asociados, pedir una reunión y firmar un documento si es que se produce el consenso.
Es entonces cuando desaparece de la web de la Agencia toda mención a estos expertos. El gabinete de prensa asegura que «no ha sucedido nada y no hay ningún problema». Al preguntarles sobre la «desaparición» de la frase que aludía a la Federación de nutricionistas indican que «a lo mejor se debe a que ellos no aportaron nada al documento, porque es una cosa del Consejo Interterritorial a la que ellos poco tienen que decir».
Malos modos; mala gestión de algo que, según los expertos, podría haber sido positivo si hubiera contado con el consenso. Javier Aranceta afirma que «habría que consensuar ese documento con la industria alimentaria, con las empresas de catering de los comedores escolares, con la industria del ‘‘vending''...». Y, por supuesto, con los expertos porque ahora la pregunta es con qué aval científico cuenta esta iniciativa que la ministra abandera.
El efecto «tipex»
- La web de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición recogía el 26 de julio una mención a la Federación de Nutrición y Dietética (foto 2). Cuatro días más tarde, ésta había sido eliminada (foto 3).
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