Atropello mortal en una carrera ilegal de coches

MADRID- Puede que no fuera un simple accidente de tráfico. Es lo que ahora están investigando el Grupo VI de Homicidios de la Policía Nacional de Madrid y la Policía Municipal. El joven de 19 años que ayer atropelló mortalmente a una mujer de 68 en Vicálvaro y que responde a las iniciales de A. L. C., se encontraba disputando una carrera ilegal de coches a lo largo de la avenida de la Democracia. Eso al menos es lo que aseguran algunos vecinos de la zona y testigos presenciales del fatal atropello. «Llevaba un Seat Ibiza y conducía a 110 o 120 kilómetros por hora, iba como un loco. Lo malo es que esto –las carreras– ya son algo habitual, sobre todo, los sábados y domingos por la mañana», aseguró un vecino.
El trágico desenlace de la supuesta competición ocurrió en una recta de la citada avenida. El autor del atropello, arrolló a la mujer, que se disponía a cruzar por un paso de peatones regulado por un semáforo junto a una amiga, que no sufrió daños. La mujer salió despedida unos 30 ó 40 metros a causa del fuerte impacto, explicó un portavoz de Emergencias Madrid. Cuando los sanitarios del Samur llegaron al lugar, comprobaron que presentaba múltiples politraumatismos en cráneo, pecho y abdomen. Trataron de reanimarla durante más de 30 minutos pero no pudieron hacer nada por salvar su vida. Los psicólogos también tuvieron que atender por crisis de ansiedad a los familiares de la mujer y a la amiga que cruzaba la calle con ella.
El autor del atropello, lejos de pararse a socorrer a su víctima, se dio a la fuga, llevándose por delante mobiliario urbano, un árbol y un semáforo, cuyos restos quedaron desperdigados por la calzada. Su escapada quedó frustrada en el momento en que cruzó la mediana y colisionó frontalmente con otro vehículo. El chaval se bajó del coche y su supuesto «rival» en la competición le recogió en otro vehículo y huyeron juntos del lugar. La Policía Municipal reconoció rápidamente a los dos conductores. Al segundo podrían imputarle un delito de denegación de auxilio.
El autor del atropello finalmente se entregó. Lo hizo sobre las dos de la tarde en las dependencias de la Policía Municipal de la calle del Plomo. Allí confesó que no era el dueño del vehículo pero sí del atropello.