Panamá Brown por Julián García Candau

La Selección, la gloriosa «Roja», está disputando partidos que la consoliden como la mejor del mundo. Para ello, la Federación Española contrata bolos con los que hacer caja y al tiempo mostrar las bondades del equipo. Para no perder puestos en la clasificación y mantener el caché, «La Roja», últimamente, está jugando encuentros con grandes equipos con los que contrastar su poderío: Puerto Rico, Costa Rica, Venezuela y ahora Panamá. De esta potencia futbolística hemos conocido en España a Dely Valdés, su seleccionador, y al infortunado Rommel Fernández, pero se han tenido más noticias de boxeadores, jugadores de baloncesto y practicantes del béisbol. Tal vez el mayor mito del pugilismo panameño fue Al Brown, campeón mundial del peso gallo, título que perdió en Valencia con Baltasar Belenguer Sangchilli. En París fue el gran amor de Jean Cocteau, como recogió el pintor Eduardo Arroyo en su libro dedicado a Panamá Al Brown, como también se conoció al púgil. El fútbol, que se sepa, no es uno de los deportes punteros del país. Panamá ha tenido para los futbolistas españoles el aliciente de la visita al famoso canal. Todo es cultura.

Vicente del Bosque aprovecha la ocasión para incorporar al equipo nacional a jugadores a quienes se les adivina futuro. como el ya citado anteriormente Martín Montoya y el jugador del Athletic, Markel Susaeta. Casi se ha considerado novedad la vuelta de Mata, quien sigue triunfando en la liga inglesa. Por lo demás, la noticia son las ausencias.
Posdata. El Levante está orgulloso del codillero Navarro y el Madrid de Pepe «Mano de piedra».