Barcelona
EL ANÁLISIS: Sabemos acoger
- ¿La inmigración es un problema?
– Es un hecho que se da en todas las sociedades cuando el crecimiento económico demanda un volumen de mano de obra que el propio país no puede aportar. Por tanto, la inmigración es útil para los migrantes que huyen de países con pocas oportunidades laborales, y lo es también para los países receptores. De ahí que la inmigración, en sí misma, no deba ser considerada como un problema.
- ¿Hemos avanzado en los problemas que surgen a raíz de la inmigración ilegal?
–Deberíamos hablar de inmigración irregular porque la palabra ilegal genera una imagen delictiva de un hecho (inmigrar sin los permisos en regla) que no está considerado delito en nuestra legislación. Pero, sí deben valorarse los problemas que acompañan a la inmigración irregular. Los más importantes son los que sufren los propios inmigrantes, que se ven sometidos a una merma de sus derechos especialmente en el trabajo. Pero también la sociedad receptora se ve expuesta a determinados problemas: la falta de cotizaciones y pago de impuestos, entre otros.
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