El personaje de la semana: Vaclav Havel

Buena parte de la sociedad española no es euroescéptica sino euroanalfabeta y poco le dicen nombres como Jean Monet, Schuman, Alcide de Gásperi, Konrad Adenauer, que hicieron de la unión del carbón y el acero el polluelo de la Comunidad Económica Europea, hoy UE. La caída del muro de Berlín no sólo desmontó el socialismo real sino que reunificó Europa gracias a olvidados o denostados como Ronald Reagan, Gorbachov, Helmut Khol o el checo Vaclav Havel, que acaba de morir. Burgués, dramaturgo, liberal, dotado de una gran elegancia física e intelectual, cautivador... las masas le llevaron hasta el Castillo de Praga (sede de la Presidencia) empujándole, por más que no militó en ningún partido, o acaso por eso. Su liderazgo fue moral y, como ahora hace Mariano Rajoy, siempre puso énfasis en la necesidad de decir la verdad al pueblo. Reconstruyó la sociedad civil checoeslovaca aunque no pudo evitar la división innecesaria del país. (Había que crear más cargos a repartir). Atlantista y europeísta sin reservas. La neumonía crónica de las cárceles comunistas devino en cáncer de pulmón.