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Gas Natural gana 767 millones hasta junio

Las menores plusvalías reducen el beneficio. El negocio exterior ya supone el 42% de su resultado operativo

Gas Natural gana 767 millones hasta junio
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BARCELONA- Gas Natural obtuvo en el primer semestre de este año un beneficio neto de 767 millones de euros. Este resultado fue un 6,7% inferior al obtenido durante el mismo periodo del año pasado debido a la menor aportación de las plusvalías por la venta de activos. No obstante, el beneficio bruto de explotación (Ebitda), con un total de 2.559 millones, aumentó el 7,3% gracias a la contribución creciente del negocio internacional, que ya supone 42,2 de cada 100 euros del resultado operativo.

Esta evolución ha permitido paliar los efectos de una situación económica adversa y las reformas del sector energético llevadas a cabo por el Gobierno. El importe neto de la cifra de negocio, 12.439 millones, creció casi el 22%.

Por su parte, las inversiones de Gas Natural Fenosa han crecido en la primera mitad del año un 6%, hasta los 551 millones, siendo España el principal país destinatario, con cerca del 58% de las inversiones consolidadas. En Latinoamérica, los principales países receptores de estas inversiones han sido México, Brasil y Colombia.

En este período, la deuda financiera neta de la compañía ha alcanzado los 16.939 millones, lo que supone una reducción del 2,3% sobre 2011 y del apalancamiento financiero al 53,3%. El consejero delegado de Gas Natural Fenosa, Rafael Vilaseca, explicó ayer que el objetivo de la compañía es mantener esta política de contención y acabar el año con una deuda de entre 15.000 y 16.000 millones de euros. «Nos sentimos razonablemente confortables», señaló Vilaseca, ya que la multinacional energética tiene liquidez suficiente y, en caso de necesidad, una capacidad «notable» para reducir inversiones.

Ante la inminencia de la reforma del sector eléctrico que podría introducir medidas recaudatorias, el consejero delegado no quiso valorar su eventual impacto antes de conocerla y reiteró la tesis de que el problema del déficit de tarifa radica principalmente en la primas que reciben las energías renovables. «No conocemos ningún texto legal que permita entrar en el análisis» pero, si contiene impuestos medioambientales al CO2 o al gas, estos «se trasladarían al cliente final puesto que gravan el producto», señaló.