Nueva Orleans

La fiesta mestiza de Coreón Dú

El músico angoleño publica «The Coreón Experiment», un disco híbrido de géneros, estilos e incluso idiomasDónde: Orange. Café. c/ Serrano Jover, 5. Madrid. Cuándo: 20 de noviembre, a las 21:30 horas. Cuánto: 12 euros

COMBINA LA MENTALIDAD modernizadora con la tradición de su país y alterna los sones caribeños con el jazz o el house
COMBINA LA MENTALIDAD modernizadora con la tradición de su país y alterna los sones caribeños con el jazz o el houselarazon

MADRID- Coreón Dú lleva la música no solamente en los genes, también en su formación. Ha sido parte de coros universitarios y de gospel, y al mismo tiempo ha estado tan pegado a la calle como para ser uno de los principales impulsores del «kuduro», el sonido más internacional de los inventados en Angola, nacido de sus mismas calles. Ésa es la mezcla que preside «The Coreón Experiment», el último disco del músico angoleño, perfecto para imaginar una tarde en una cama balinesa en una costa cálida. Un álbum para una gozosa molicie, un abandono sencillo. Algunos han dado en llamar a este género Afro House. Otros, Caipirinha Lounge. En todo caso, el estilo está unido a su propio origen mestizo, en el que se alternan los sones caribeños con el jazz o el house. Algunas veces R&B, otras, un cálido «ambient», una juguetona bossa nova que no aspira a cambiar la historia, sino que nace de la misma gracia con la que un chico de suburbio pasa de jugar fútbol al baloncesto callejero: con naturalidad y total desprejuicio.

«Jazzduro»
Las señas de identidad de Coreón Dú están por definirse. A veces es David Craig, otras se busca en Boyz II Men, y claro, también le tienta ser Maceo Parker. Será por ambición o curiosidad, busca los sones latinos o la electrónica donde, por cierto, consigue, sin duda, sus mejores momentos. Incluso se atreve a ir un paso más allá del «kuduro» y acuña en el álbum el término «jazzduro», con un tema en el que canta un fraseo marcado sobre una instrumentación jazz...Coreón Dú se ha educado vocalmente gracias a la formación en la técnica clásica del coro de la Loyola University de Nueva Orleans, y también ha trabajado en diversos proyectos creativos relacionados con el teatro, la televisión, la música o la danza. Combina la mentalidad modernizadora y tradicional de su padre, presidente del país. Como productor, es responsable de aportar glamour al ritmo más urbano, el ya citado «kuduro», nacido del cruce de las tradicionales danzas angoleñas y la lectura del baile callejero de la gran ciudad, que ha llegado a ser el género favorito del mundo gracias a canciones como la superventas de Don Omar. Pero la visión de Coreón Dú resulta bastante más elegante. Ha compartido cartel con nombres como el citado Maceo Parker o Cassandra Wilson en el Festival de Jazz de Luanda (Angola), un país donde se cocina una escena musical interesante y abierta que ha acogido propuestas como la de la española Concha Buika, y en la que su fórmula se explica como un resultado natural.

«The Coreón Experiment» es una fusión de sonidos gracias también a las diversas aportaciones de artistas como André Mingas, Matías Damásio, Simmons Massini, Wyza Heavy C, Jeff Brown y el dueto Filipe Mukenga y Filipe Zau. La mayor parte del disco está en inglés y portugués, pero tan lejos lleva la mezcla en el álbum que disfruta con el castellano en la melosa «Yo soy de otra». Por todo esto, el título del disco resulta muy adecuado: un «experimento» que podría haberse denominado también «cóctel» o, directamente, la «fiesta» de Coreón Dú. El joven músico pasará por Madrid este miércoles, por cierto, en el marco del Festival de Jazz de Madrid, fiesta ésta a la que todos están invitados.

 

Todos los acentos del Portugués
El disco ha sido grabado en Angola, Brasil y Portugal, las principales naciones del portugués, y claro, de esa manera, tiene un trocito del sabor de cada uno en las voces de las invitadas. Irina, de Angola, participa en «Beautiful»; Luciana Abreu, de Portugal, se luce en «Set me Free», y Marcia Castro, de Brasil, apoya el tema «Oportunidade perdida». No son los únicos acentos diversos del disco, pues en él también caben frases en castellano y kikongo, la lengua autóctona de la región norte de Angola. En definitiva, todo un viaje sonoro también en las letras.