«Sólo en este caso» el Gobierno llamó por una licencia

MADRID.- El alcalde de Sant Boi de Llobregat (Barcelona), el socialista Jaume Bosch, negó ayer ante el magistrado instructor del Tribunal Supremo del «caso Campeón» haber influido en la concesión de la licencia para que Azkar pudiese construir una nave industrial. De hecho, aseguró que cuando se entrevistó con José Antonio Azkar, empresario amigo de José Blanco y vicepresidente de la empresa, ese permiso estaba ya en vías de solución, ya que los problemas detectados con anterioridad se habían resueltos.

Sin embargo, Bosch –quien matizó que es militante del PSC pero que con el PSOE no tiene «ninguna» relación–, reconoció ante el magistrado que este caso ha sido el único en el que ha recibido llamadas de altos cargos de la Administración para interesarse por un tema relacionado con la concesión de licencias de naves industriales.

Su declaración al respecto fue rotunda: «Nunca ha recibido llamada de cargos de la Administración para interesarse por el estado de licencias, sólo en este caso».

Fue el entonces número dos de José Blanco, el secretario de Estado de Fomento, Isaías Taboas, quien le llamó para ver «si podía recibir» a José Antonio Orozco, «porque estaba interesado en instalara una nave en los terrenos de AENA», aunque no le explicó «el problema que tenían» para lograr esa licencia. Sin embargo, aseguró que si Orozco se lo hubiese pedido directamente, le habría recibido igualmente.

Sobre esta cuestión, Taboas declaró el pasado día 13 que el entonces ministro Blanco le comentó que había «un problema con la empresa Azkar y unos terrenos del aeropuerto de Barcelona» y que se «interesase» por ello, ya que «había algo que no funcionaba».
El alcalde de Sant Boi, quien aseguró que no conoce a Blanco, manifestó que la llamada del secretario de Estado no condicionó «de ninguna manera» la concesión de la licencia, cuya tramitación, aseguró, fue «excesiva»