Una profesión con futuro

El futuro de los hijos es algo que preocupa y angustia a los padres. ¿Qué tienen que estudiar? Hace unos años se sabía que ser ingeniero de Caminos, por poner un ejemplo, era la garantía de un buen futuro tras un periodo duro, muy duro, de estudio. Había oposiciones que eran una garantía para cualquier familia. Los padres se sentían orgullosos si su hijo sacaba la oposición de registrador, notario, abogado del Estado, etc... El problema es que en esas profesiones, como en casi todo en la vida, hay que trabajar duramente tras esos largos años de estudio. Ahora conocemos una profesión que había pasado desapercibida: liberado sindical. Es una «oposición» que garantiza un buen sueldo y muy poco trabajo, ya que tras ser elegido en las listas sindicales, sea en una gran empresa o en la Administración, se pasa a la mejor vida posible. Es un privilegiado que teóricamente representa a sus compañeros y está liberado de trabajar. En realidad se dedica a la política sindical y a sus cosas. Un chollo.