Rajoy y Sarkozy deciden unir fuerzas en política económica europea

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha mostrado a favor de crear una tasa a las transacciones financieras a nivel europeo, tal y como ha propuesto el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, al mismo tiempo que ambos mandatarios han negado que existan diferentes puntos de vista en la eurozona o haya "desacuerdo"con la canciller alemana, Angela Merkel, sobre este asunto.

En rueda de prensa al término de su reunión en la Moncloa con el mandatario francés, Rajoy recalcó que una tasa a las transacciones financieros lleva tiempo debatiéndose y todos los lideres europeos quieren que esta se discuta, se acuerde y se haga cuanto antes.

En este sentido, recordó que en Europa muchas veces hay decisiones que tardan mucho tiempo en tomarse y otras que tardan en entrar en vigor, cuando sería "muchísimo mejor"que se tomarán con "mayor rapidez", como en esta ocasión.

Por su parte, el mandatario galo reiteró su defensa de la instauración de una tasa a las transacciones financieras a nivel europeo, aunque "sería mejor a nivel global", y aseguró que no existe "ningún desacuerdo"con la canciller alemana, Angela Merkel, en esta cuestión.

Según Sarkozy, hace falta que haya "un grupo líder"de países que la adopte para que luego otros le sigan, porque no sería correcto no esperar a que otros tomen la decisión de aprobarla sin hacer "nada"entretanto. Asimismo, defendió que no se podría justificar ante los ciudadanos el que a ellos se les suba los impuestos y a los financieros no se les aplique también un impuesto.

Y si España apoya al Gobierno galo en este sentido, Sarkozy mostró su aprobación a la petición de jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, de que España mantenga un puesto en el comité ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE) una vez que concluya el mandato del actual consejero, José Manuel González-Páramo, el próximo 31 de mayo.

Sarkozy ha brindado este respaldo en la rueda de prensa que ha ofrecido con Rajoy en el Palacio de la Moncloa, después de una reunión de trabajo en la que los asuntos económicos han centrado buena parte del diálogo.

En su intervención inicial, Rajoy ha hecho pública la aspiración de seguir manteniendo uno de los seis puestos directivos en el BCE por el nivel de riqueza de España y el papel que desempeña en Europa.

También en su primer turno de palabra, Sarkozy ha asegurado que Francia apoya "con toda su fuerza"la presencia de un representante español en el consejo ejecutivo del máximo órgano financiero de la UE.

Según Sarkozy, tanto en este asunto, como en el apoyo a la tasa sobre las transacciones financieras, "hay una armonía muy importante"entre ambos países.

El presidente del BCE, el italiano Mario Draghi, declinó el pasado día 12 pronunciarse sobre si España debe seguir teniendo un consejero en el comité ejecutivo.

Estos países también alegan que los socios del sur de la UE ya están suficientemente representados en la institución por un presidente italiano y por el vicepresidente, el portugués Vítor Constancio.