La esquizofrenia del régimen sirio

Siria celebrará el 26 de febrero un referéndum sobre la nueva Constitución que abrirá el camino al pluralismo político. Así lo anunció ayer la televisión estatal, ante las miradas atónitas de millares de sirios que siguen sufriendo la represión del régimen.
Difícilmente, los habitantes de Homs, bajo la artillería de las fuerzas leales a Bachar Al Asad, hayan recibido con júbilo el decreto presidencial. El Ejército sirio mantenía por decimotercer día consecutivo el asedio a esta castigada ciudad rebelde, donde ayer las fuerzas progubernamentales bombardearon un oleoducto.
Más de 500 muertos han dejado los ataques continuados e indiscriminados del régimen contra la población civil en la ciudad de Homs durante la última semana. También ayer en Hama, las fuerzas progubernamentales lanzaron una ofensiva con tanques y bombardearon barrios residenciales, según fuentes de la oposición. Sería la primera vez que el Ejército utiliza fuego de artillería contra viviendas de civiles.
Pero parece que Asad no puede ver con claridad detrás de los altos muros que rodean su palacio presidencial en Damasco. El mandatario sirio, que insiste en que «elementos terroristas» están causando el caos y la violencia que sacude al país, quiere mostrar que es capaz de cumplir sus promesas reformistas, aunque sea demasiado tarde para los sirios.
El proyecto de reforma de la Carta Magna, elaborado por el Comité Nacional, garantizará «la dignidad del ciudadano sirio y sus derechos básicos» y convertirá a Siria «en un ejemplo a seguir en lo que respecta a las libertades públicas y la pluralidad política», reza el documento. Con ello, se romperá el monopolio del gobernante partido Baaz, en el poder desde 1963, abriendo el país al multipartidismo. El borrador de la futura Constitución pone límite al mandato del presidente de la República, que será de siete años, y que sólo podrá ser renovable por otro más. Pero la nueva normativa para limitar el poder del jefe de Estado no se aplicará a Asad, que tendrá una nueva oportunidad para poder ser reelegido, después de que termine su mandato en 2014. Tras el plebiscito, habrá un plazo de 90 días para la celebración de elecciones generales, si es que antes no estalla una guerra civil en toda su dimensión.
En el terreno diplomático, París y Moscú han empezado a negociar una nueva resolución sobre Siria en la se contemplará la posibilidad de crear «corredores humanitarios» en el castigado país de Oriente Medio.

¿Se enviarán «cascos azules»?
La Asamblea General de la ONU votará hoy la propuesta que aprobó la Liga Árabe el domingo en El Cairo y que plantea el envío de una fuerza multinacional conjunta a Siria. El régimen de Asad se ha opuesto categóricamente al envío de «cascos azules».