Los «intrusos» socialistas

Es un grave error utilizar subterfugios para esconder la realidad. Ahora resulta que los golfos que se prejubilaron sin haber trabajado nunca en las empresas que presentaron los ERE no eran otra cosa que intrusos. El cinismo es monumental. Hasta el momento son más de setenta, pero se han revisado tan sólo la mitad de los expedientes autorizados por lo que la cifra será superior. En todos ellos coincide su pertenencia al PSOE de Andalucía, incluso con destacados dirigentes, o la condición de familiares de los golfos. He de reconocer que mi favorito es el ex consejero de Empleo de la Junta de Andalucía que comenzó a trabajar en la empresa justo el día en que nació. El grado de indecencia es tan grande que resulta inquietante. Una trama de estas dimensiones era un secreto a voces. No estamos ante un acto aislado, sino frente a un fraude sistemático que debería ser conocido por algunos de los dirigentes socialistas más importantes. El PSOE ha actuado en Andalucía como si fuera su cortijo.