Dexia pierde un 473% en Bolsa tras ser nacionalizada por el Gobierno belga

MADRID- Los títulos de la franco-belga Dexia perdieron ayer un 4,73% en Bolsa un día después de que el Gobierno belga anunciase la nacionalización parcial de la entidad, cuyo capital será dividido en tres partes en una operación que cuenta con el respaldo del consejo de administración del banco.
Tras aprobar la reestructuración con capital público por valor de 4.000 millones de euros, el principal ejecutivo del consejo de administración de la entidad, Jean-Luc Dehaene, presentó su dimisión. El presidente saliente, que llevaba en Dexia desde 2008 –tras el primer rescate–, argumentó que la nacionalización implicará un profundo cambio en los órganos directivos del banco, por lo que no tiene sentido mantener a los actuales consejeros.
La operación supone la creación de un «banco malo» para aislar los activos «tóxicos» de Dexia, que recibirá garantías de refinanciación por importe de hasta 90.000 millones de euros por parte de los tres gobiernos. En concreto, los fondos de esta entidad residual estarán garantizados por Bélgica (60,5%), Francia (36,5%) y Luxemburgo (3%).
La nacionalización de la filial belga «estará concluida en un futuro muy próximo» y permitirá a Dexia reducir sus necesidades de financiación a corto plazo en más de 14.000 millones, mejorando así la solvencia en más de 200 puntos básicos y reduciendo en 18.000 millones su cartera de activos.