«Se harán los sacrificios necesarios»

Madrid- Los nuevos jefes de Estado Mayor de los Ejércitos y la Armada, nombrados en el Consejo de Ministros del pasado viernes, tomaron ayer posesión con la vista puesta en las grandes dificultades económicas que entrañarán sus mandatos. No en vano, la reducción de 633,68 millones de euros del presupuesto de Defensa para este 2012, un 9,1% menos que el pasado año, obligará a apretarse el cinturón a unas Fuerzas Armadas en crisis. Una problemática que centró los discursos de los tres nuevos jefes de los Ejércitos y de la Armada que ayer tomaron posesión de sus respectivos cargos ante la presencia del ministro de Defensa, Pedro Morenés.

El primero en plantearlo fue el nuevo Jefe del Estado Mayor del Ejército (JEME), el general Jaime Domínguez Buj, quien advirtió de que «cualquier nuevo sacrificio» económico que se le pida al Ejército significaría «la pérdida de capacidades», aunque matizó que se harán los sacrificios que sean necesarios. El nuevo JEME, que sustituye al general Fulgencio Coll, señaló que el descenso continuado de los presupuestos ha obligado a adoptar «duras medidas de ahorro», que han supuesto la «inmovilización del 50% de los vehículos de combate», la pérdida de materiales, así como otros «sacrificios al personal».

En la misma línea, el nuevo Jefe del Estado Mayor del Aire (JEMA), el general Francisco Javier García Arnáiz, admitió que las Fuerzas Armadas no se encuentran precisamente «en un momento de sol, sino de fuertes tormentas y de frentes que llegan sucesivamente». Eso sí, García Arnáiz se mostró mucho más optimista. «Estamos en un momento de baja visibilidad, pero sabremos responder, encontrar el localizador y mantenernos en el aire», aseguró.

Por último, Jaime Muñoz-Delgado y Díaz del Río, nuevo almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), aseguró que la «profunda crisis económica nos obligará a ser muy rigurosos en la administración de los recursos», aunque reafirmó su intención de buscar «el máximo rendimiento adecuando el presupuesto a esta crisis».