Gómez obtuvo peores resultados en Madrid que Rubalcaba y López

MADRID-El terremoto desatado en el PSOE tras las derrotas electorales en Galicia y Asturias continúa teniendo réplicas en Madrid. El motivo es la actitud de su líder, Tomás Gómez, que el lunes fue uno de los primeros en reclamar a su partido «cambios serios y profundos»; unos cambios y reflexiones que, tal y como informó ayer LA RAZÓN, le reclaman a él en Madrid.

«El mundo de los cambios parece que pasa siempre por otros y nunca por uno mismo», tuiteaba Pilar Sánchez Acera, rival de Gómez en las primarias de febrero y representante del 41% de los socialistas madrileños. Los críticos se quejan de que al secretario general de los socialistas de Madrid parece que se le hayan olvidado los resultados que él obtuvo para su partido en las elecciones autonómicas a la Comunidad de Madrid en las que él fue cabeza de lista. Y es que Gómez no sólo no supero el enfrentamiento con Esperanza Aguirre, sino que sacó los peores resultados cosechados por el PSM en toda la democracia. El líder de los socialistas, que ahora exige cambios a Alfredo Pérez Rubalcaba por la derrota electoral de Galicia y Asturias, perdió seis escaños y más de 219.000 votos respecto a los resultados de su compañero Rafael Martínez-Simancas, al pasar de 1.002.862 votos en 2009 a 783.034, en 2011; unos resultados por los que Simancas dimitió y que, sin embargo, mantienen a Gómez al frente del Grupo Parlamentario Socialista.

Lo curioso es que ayer, a través de su portavoz adjunto en la Asamblea, José Quintana, el líder del PSM volvió a la carga contra Rubalcaba y sobre todo, contra la vicesecreatria del partido, al segurar que puede que los ciudadanos «demanden algunas cosas más» que la «reflexión política» anunciada por Elena Valenciano tras el batacazo electoral del domingo.

Gómez y los suyos debieron olvidar ayer que incluso Rubalcalba, en su derrota electoral frente a Mariano Rajoy del pasado 20 de noviembre de 2011, obtuvo mejores resultados en Madrid que el PSM en sus elecciones autonómicas. Frente a los 783.034 votos que consiguió Gómez en mayo de 2011 en la Comunidad, sólo seis meses más tarde, Rubalcaba sacó 875.044 apoyos en la región, 92.010 más que en las elecciones regionales.

Es curioso que si se compara la derrota obtenida por Pachi Vázquez y Patxi López en Galicia y País Vasco, respectivamente, por las que Tomás Gómez exige cambios «serios y profundos», el líder de los socialistas madrileños tendría que callar más que decir.

Pachi Vázquez ha perdido 230.817 votos, es decir sólo 11.000 apoyos más que Gómez en su última prueba frente a las urnas; y si se atiende al País Vasco, mientras que López ha perdido 106.173 votos (9 escaños) respecto a 2009; Gómez se dejó en las urnas un total de 219.828 papeletas (6 escaños) respecto al resultado de Simancas.

El resultado de todo esto es que a pesar de que el lunes Gómez salió a la palestra para exigir «cambios profundos y serios» en el partido, ayer, la que fuera su rival en las primarias internas del partido de 2010 y conocida «rubalcabista», optara por ignorar las palabras del secretario general del PSM al afirmar que «nadie con la consideración de líder dentro del PSOE ha pedido cambios urgentes» en la dirección del partido como consecuencia de la derrota electoral.
Algo más irónico estuvo el consejero de Presidencia y Justicia de la Comunidad, Salvador Victoria, al valorar las críticas de Gómez a su partido: «Si Gómez pide responsabilidades por el fracaso socialista, qué pedirán los afiliados del PSM ante un líder como el señor Gómez, que ha llevado a su partido ante los peores resultados de su historia», se preguntó. Por ello, el consejero y portavoz del Gobierno ha recomendado al secretario general del PSM que «se aplique ese cuento y deje él también su cargo en el PSOE si eso es lo que piensa».