Grafeno el material que podría revolucionar el mundo de la electrónica

Los expertos auguran un futuro próximo con pantallas extraplanas enrollables y microchips que procesen información diez veces más rápido que los actuales gracias a la década de investigación conjunta de Andre Geim, de 51 años, y Konstantin Novoselov, de 36.

Geim, de origen ruso, raíces alemanas y nacionalizado holandés, nació en la ciudad rusa de Sochi, en 1958, y se doctoró en Ciencias Físicas en 1987 en la Academia Rusa de Ciencias de Chernogolovka.

Tras su doctorado, pasó a ejercer en la Universidad de Nottingham (Reino Unido) primero, en la danesa de Copenhague después y finalmente en las holandesas de Nijmegen y Eindhoven.

Poco después adquirió la nacionalidad holandesa, pero desde 2001 ejerce en la Universidad británica de Manchester, donde empezó a investigar junto a Novoselov, también de origen ruso.

Geim está considerado una autoridad en la materia y ha sido distinguido en los últimos años con prestigiosos premios, como el EuroPhysics en 2008 y el Körber Preis, de la Fundación alemana homónima, ambos compartidos con Novoselov.

Por su parte, Novoselov nació en 1974 en la localidad de Nizhny Tagil (Rusia) y tras sus estudios universitarios en su país natal, realizó su doctorado en Holanda, donde conoció a su futuro compañero de investigaciones.

Entonces aceptó una invitación de Geim para seguir trabajando juntos y se trasladó al Reino Unido para hacer el postdoctorado. Allí continúa desarrollando su actividad en la actualidad dentro del Grupo de Investigación Mesoscópica de la Universidad de Manchester.

Fruto de sus trabajos con el grafeno, Novoselov ha publicado más de 60 documentos de investigación, muchos de ellos ampliamente citados en las revistas especializadas.

A las distinciones compartidas ya por ambos se une ahora el más codiciado premio del ámbito científico, que recogerán en la ceremonia de entrega de los Nobel el 10 de diciembre, coincidiendo con el aniversario de la muerte de su fundador, Alfred Nobel.

Se repartirán, asimismo, la dotación del premio, de 10 millones de coronas suecas (1,1 millones de euros o 1,5 millones de dólares).