La prostitución callejera estará prohibida a partir del mes de agosto

BARCELONA- El Ayuntamiento de Barcelona dio ayer el penúltimo paso para abordar el fenómeno de la prostitución en el espacio público y prohibirla. El veto saldrá adelante tras haber sido negociado entre CiU y el PP, que ha hecho de esta cuestión su caballo de batalla, pese a la oposición PSC, ICV-EUiA y UpB. A expensas de la aprobación definitiva en el pleno del próximo miércoles, la modificación de la ordenanza de civismo entraría en vigor en agosto.

Uno de los cambios sustanciales son las multas, para las prostitutas, la sanción será de 100 a 300 euros por ofrecer o aceptar prestar servicios sexuales retribuidos en la calle, y de 300 a 750 si se hace a menos de 200 metros de una escuela; para los clientes que pidan o negocien, y cualquier conducta que promueva la prostitución callejera, la multa será de 1.000 a 1.200 euros, y de 1.200 a 1.500 si a menos de 200 metros de una escuela; si se mantienen relaciones sexuales retribuidas en la calle, será de 1.500 a 3.000. Las prostitutas, a su vez, pueden conmutar la pena si participan en cursos de la Agencia por el Abordaje Integral del Trabajo Sexual. También se elimina el aviso previo de la Guardia Urbana.