Todo por el golpe

Del 23-F llevamos escribiendo 30 años y a estas alturas poco queda por añadir a lo reflejado por unos y otros en libros y publicaciones. Por eso en este trigésimo aniversario me ha llamado la atención el contenido de las actas redactadas por los secretarios del Congreso, adelantadas en exclusiva por La Razón y mi compañera Esther L. Palomera. Amén de los comentarios entre diputados y entre éstos y los golpistas, destaca la factura de la asonada, o sea, lo que los hombres de Tejero se comieron y bebieron gratis total en 18 intensas horas de cautiverio, que fueron: 16 cajas de cerveza, 19 de champán, 143 botellas de güisqui y ginebras, 94 de vino, 14 latas de espárragos, 7 de fruta, 14 de mermelada, 4 de bizcochos, 6 de bonito, 12 kilos de chorizo, 9 de jamón, 9 de salchichón, 17 de queso, 26 de naranjas, 9 de plátanos, 21 de manzanas, 15 de peras, 2 de café, 22 barras de pan, 23 cajas de leche y 16 lechugas. O sea, que a lo que en realidad fueron los hombres Antonio Tejero al Congreso, a la vista del resultado, es a comer y a beber. Se comieron 93.000 pesetas de la época, se bebieron 106.000 y se fumaron 58.000. Y arramplaron hasta con 5.000 pesetas en propinas que había en el bote de los camareros del bar de Las Cortes. Todo por el golpe.