Bélgica

Ford confía en la ejecución del Corredor y aumentará la producción de Almussafes

A partir de 2014 asumirá la fabricación de una planta belga que cerrará 

Isabel Bonig, Ramón Luis Valcárcel, Alberto Fabra y Máximo Buch en el seminario
Isabel Bonig, Ramón Luis Valcárcel, Alberto Fabra y Máximo Buch en el seminariolarazon

VALENCIA- La multinacional Ford confía en la ejecución del Corredor Mediterráneo y por ello, trasladará a partir de 2014 la producción de los vehículos de la planta de Genk (Bélgica). El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, confirmó ayer esta información en un seminario del Comité de las Regiones sobre infraestructuras.

La buena noticia, que lamentablemente se debe al anuncio del cierre de la planta belga, permitirá al Gobierno valenciano incrementar la presión al Ejecutivo central para que apueste de manera decidida sobre este eje y así lo aseguró ayer el jefe del Consell. Fabra no podía ocultar su alegría. Por una parte, celebraba la importancia que tiene para la Comunitat este anuncio, «somos capaces de generar confianza y podremos crear prosperidad económica» y,por otra, le proporciona argumentos para conseguir más financiación para la ejecución del tercer carril, fase primigenia del Corredor Mediterráneo.

La Generalitat presentará a través del grupo popular una serie de enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado para aumentar en 144 millones la inversión en la Comunitat. De éstos, el tercer carril se queda casi con la mitad. «Este anuncio nos da más fuerza en nuestra reivindicación. Estamos en unos momentos donde hay que priorizar aquellas inversiones que van a tener un retorno inmediato».

Por si el argumento no tenía todavía suficiente peso, Fabra aseguró que el presidente de Ford España, José Manuel Machado, le informó de que la multinacional no exigía condición alguna para el traslado de la producción.

«No estamos hablando de futuribles o de posibilidades el día de mañana, sino de realidades y compromisos ciertos. Es la apuesta de una multinacional por un territorio que sabe que aquello a lo que se compromete sale a flote y se materializa».

La euforia que corría ayer por la Generalitat valenciana tenía el reverso de la medalla en Bélgica. 4.300 trabajadores dependen de la factoría que cerrará a finales de 2014 y 5.000 más empleados en subcontratas.

El Gobierno belga emitió un comunicado en el que decía estar «consternado» y recordaba que deberá respetar el derecho los trabajadores.