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Ronald W Busuttil: «Hay que ayudar a Asia a crear un sistema de trasplantes efectivo y ético»

Lleva más de tres décadas en la lucha contra las enfermedades hepáticas, unos años que le han convertido en referente en su campo, pero que no le impiden reconocer los méritos ajenos. «No hay duda de que hará un gran trabajo..

El cirujano estadounidense (a la derecha), junto al presidente de la ILTS, Juan Carlos García Valdecasas, en la sesión inaugural del congreso
El cirujano estadounidense (a la derecha), junto al presidente de la ILTS, Juan Carlos García Valdecasas, en la sesión inaugural del congresolarazon

¿Qué conclusiones espera sacar de este congreso?
-Muchas y muy buenas. Han acudido representantes de todas partes del mundo. Hay un montón de entusiasmo y buena ciencia. Además, Valencia es una ciudad muy bella, todo han sido facilidades.

-De entre todas las bondades del sistema español de trasplantes, ¿cuál destacaría?
-Es difícil elegir una. El modelo español tiene grandes profesionales como el doctor Juan Carlos García Valdecasas –presidente electo de la ILTS– pero es que este sistema también pone especial atención en la coordinación de las donaciones, lo que permite que sea más eficaz. En Estados Unidos no funciona igual, ya que cada Estado suele tener su propio plan, así que la normativa no es tan efectiva como la española. Nos queda mucho por aprender.

-¿Qué futuro le augura al campo de los trasplantes?
-En muchos países de Europa y también en Estados Unidos, los trasplantes intervivos han alcanzado su punto máximo. El número de pacientes en lista de espera sigue creciendo, pero el de donantes permanece estable. Por su parte, España tiene la más alta proporción de número de donantes respecto a la población –34 por cada millón de habitantes–, frente a los menos de veinte por millón de EE UU. 

-¿Puede llegar a convertirse el español en un modelo universal?
-Debería. Claro que debería. Todo lo que pueda hacer el sistema de donaciones estadounidense para parecerse al español, estará bien. El problema en mi país es que el número de donantes no ha crecido en los últimos cinco o seis años, de hecho, ha descendido, al menos el de buenos donantes.

-¿Cuál es la causa?
-Es que la gente ya no dona. Y los que donan, no son tan buenos para hacerlo, hay muchas personas obesas... Además, ya no utilizamos tantos donantes cadavéricos de muerte cerebral, sino en parada cardiaca y eso da una calidad sensiblemente inferior.

-¿Qué será más importante en el futuro, la investigación, los avances en farmacología o la concienciación de la sociedad para aumentar las donaciones?
-Todas esas cosas son importantes. Lo que tenemos claro es que hay que hacer algo con la Hepatitis C, que es la primera causa de trasplante de hígado, y la que peor resultado tiene. El 30 por ciento de los enfermos de Hepatitis C pierde su riñón a los cinco años. Por ello es importante controlar al enfermo, para evitar que pierda su hígado. 

-¿Qué papel juega Asia en los trasplantes hepáticos?
-Ellos tienen un número ilimitado de pacientes que necesitan un trasplante. Hay 200 millones de chinos que tienen Hepatitis B, y muchos de ellos necesitarán una intervención ¡Y eso que sólo están arañando la superficie!

-Sin embargo, su planteamiento del problema difiere mucho del occidental.
-China deberá ser uno de los asuntos que deberá tratar la ILTS en los próximos años. Tiene la mayor población y con ella vienen las mayores necesidades, pero necesita una mayor organización e infraestructuras, porque actualmente no tienen nada. Nosotros, desde Occidente, debemos darles no sólo una oportunidad, sino que tenemos la obligación de ayudarles del modo en el que podamos para que puedan llegar a establecer un sistema justo, efectivo y ético. Ése es el gran reto al que nos enfrentamos. Los chinos nos están mirando, están hambrientos de nuestra ayuda y es nuestro deber como líderes en este campo responder a su llamada. Necesitamos trabajar como colegas, no como competencia.

El referente americano
Lleva más de tres décadas en la lucha contra las enfermedades hepáticas, unos años que le han convertido en referente en su campo, pero que no le impiden reconocer los méritos ajenos. «No hay duda de que hará un gran trabajo. Será el mejor presidente de la ILTS», opinaba sobre el nuevo responsable de la entidad, Juan Carlos García Valdecasas, catedrático de cirugía de la UB y jefe del servicio de Cirugía General y Digestiva del hospital Clínic de Barcelona.