Feria del Libro

Las ventas bajan un 95 por ciento por la lluvia

Mucha lluvia y poco Larsson en la Feria del Libro
Mucha lluvia y poco Larsson en la Feria del Librolarazon

Al nivel de 2008. Hasta ahí han descendido las ventas. La lluvia ha sido inclemente con la Feria del Libro de Madrid y ha desbaratado un arranque imprevisto que desterró el pesimismo y las cautelas que predominaban al inicio del encuentro. «El primer y segundo fin de semana fueron muy buenos. Se habían conseguido unas cifras superiores a las de la edición anterior, pero toda una semana lloviendo, de lunes a viernes, es demasiado, y, al final, acabó repercutiendo en los compradores, sobre todo en los que acuden esos días por la tarde y que mayoritariamente sabemos que son compradores», lamenta Teodoro Sacristán, director de la cita. Antes de su apertura en El Retiro, los temores provenían de la endeble situación económica que atraviesa el país, azotado por las malas noticias financieras. Pero esas dudas se diluyeron enseguida. «No ha sido así. Si hubiéramos seguido esa tónica hubiéramos tenido un porcentaje de ventas más alto». Este descenso de ventas tiene su propio rostro. Dos cifras. Un 9,5 por ciento menos respecto al año anterior –«recordemos también que esa edición fue excepcional en resultados»– y un total de ventas que se redondea en 8.200.000 millones de euros en ventas. El índice de visitantes también se vio afectada por la pequeña ola de calor que hubo durante el puente festivo.