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Cantabria

Las autonómicas costarán este año casi 2000 millones de euros

Primero fue Esperanza Aguirre la que abordó el problema, más tarde María Dolores de Cospedal y hasta el propio presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, dejó, a su vez, clara la intención de esta formación de pedir en el Congreso de los Diputados «libertad» para las comunidades autónomas a la hora de poder optar por la privatización o no de sus canales de TV autonómicos.

Las autonómicas costarán este año casi 2000 millones de euros
Las autonómicas costarán este año casi 2000 millones de euroslarazon

Su principal argumento, además de la crisis actual, la nueva financiación de RTVE y la implantación definitiva desde el pasado abril de la TDT, es que el coste de los canales superará este año los 1.860 millones de euros, a los que hay que sumar los 1.480 millones más que acumulan de deuda, sin contar las aportaciones que cada gobierno regional ha realizado para compensar esas pérdidas.

Hay que tener en cuenta que durante 2008, el último año del que figuran datos oficiales, las subvenciones alcanzaron los 698,76 millones de euros, más del doble que los 337,08 millones que se les dieron el ejercicio anterior.

Menos publicidad
Todo ello se contempla en el último estudio sectorial, elaborado por Deloitte para la Unión de Televisiones Comerciales (Uteca), que refleja que los gastos de explotación de estas cadenas son hasta tres veces superiores a los de las privadas. A ello hay que añadir que en el terreno publicitario tampoco les han ido bien las cosas, habida cuenta de que en los últimos años también han visto menguar los ingresos, ya que en 2009 no pasaron de los 237 millones de euros, un 25,6% menos que los 319 que habían recibido en 2008, frente al tan sólo 10% que habían perdido las privadas. Igualmente se debe recordar que en ese mismo año 2008 las autonómicas habían perdido a su vez un 9,9% respecto a los 354 millones ingresados en 2007.

Esas cifras siguen siendo, pese a todo, demasiado elevadas para las televisiones privadas, que, a pesar de no poner en duda la necesidad de la existencia de las radiotelevisiones regionales, consideran que llevan a cabo una competencia «desleal», al recibir subvenciones por un lado e ingresos publicitarios por otro (esos 237 millones que ingresaron en 2009 suponían aproximadamente el 10% del total de la tarta publicitaria en TV, que Infoadex sitúa en los 2.299 millones de euros, un 22,9% menos que en 2008).

Sin embargo, el secretario general de la Forta (Federación de organismos de radio y televisión autonómicos) Enrique Laucirica, ve necesaria incluso la publicidad porque sólo esas cadenas pueden atender a pequeñas y medianas empresas de ámbito regional. Por ese motivo cree que si son capaces de lograr más anunciantes se deberá exclusivamente al hecho de que «somos las cadenas con menos saturación publicitaria».

Lo que sí reconoce Laucirica es que la Forta ha incrementado sus precios un 60% en la publicidad que comercializa de manera conjunta. Pero esa política, según Uteca, «es otra indecencia», toda vez que, de acuerdo con los datos que manejan las privadas, la misma les ha permitido a estas cadenas públicas captar hasta el 10% de la publicidad liberada por Televisión Española desde que ésta, por ley, dejara de emitir anuncios a comienzos del presente ejercicio.

Muchos trabajadores

Otro de los puntos que tampoco juegan a favor de las cadenas autonómicas es el elevado número de trabajadores con que cuentan. Los grupos de radiotelevisión de las diferentes comunidades autónomas, 13 corporaciones en otras tantas regiones (aún no tienen radiotelevisión propia las de Cantabria, Castilla y León, La Rioja y Navarra), reúnen nada menos que a unos 10.000 profesionales cuando, por ejemplo, Telecinco y Antena 3, dos de las televisiones más rentables de Europa, no alcanzan los 800 trabajadores cada una. Así, no es de extrañar que casi un tercio de los gastos de explotación de las autonómicas durante 2008, partida que ascendió a 1.501 millones de euros, fue para pagar al personal. En total fueron 416 millones de euros, 18 más que en 2007.

En este sentido, TV3 es la que cuenta con un mayor número de trabajadores, 2.700 empleados según datos de 2008, seguida por Canal Sur, con 1.680;Telemadrid, con 1.122; la Radio Televisión Valenciana, con 1.122; y TVG, con 1.000. Con estos números, el informe solicitado por Uteca establece que el coste de empleados por punto de audiencia es de 100.000 euros para los canales privados, frente a los 460.000 euros que les costaría a las autonómicas, o lo que es lo mismo, 37,2 millones de euros de gastos de explotación por punto de las privadas contra los 104 millones de las públicas.

Y es que por mucho que las televisiones autonómicas ajusten a la baja sus presupuestos (la andaluza, por ejemplo, cerró 2009 con menos pérdidas por su plan de austeridad, mientras la valenciana redujo el pasado año un 6% los costes salariales del organigrama directivo, y la madrileña, a través de la Comunidad de Madrid, anunció la aplicación a los trabajadores de la rebaja salarial que sufrirán el resto de empleados públicos), éstos vienen a equivaler en torno al 1,15% del que disponen las comunidades en las que operan, porcentaje que en en el caso de la de Baleares llega al 3,48%, la proporción más alta.

A pesar de ello, según el estudio de Deloitte, el coste neto anual por hogar más alto de los canales regionales lo tiene la EiTB vasca, con 140 euros que alcanzarían los 253 euros brutos por hogar al año si a eso se añadiese el sostenimiento también de la propia TVE.

Esa cantidad que les cuestan a los vascos los canales públicos que ven es la más elevada de la sociedad española, ya que por detrás de ellos se situarían los catalanes, con un desembolso por hogar de 209 euros; los valencianos, con 202; los murcianos, con 192; los andaluces, con 173; los canarios, con 171; y los castellano-manchegos, con 169, toda vez que no hay información sobre Baleares y Galicia.

 A pesar de todo, mientras las cadenas privadas mantienen, como afirma el secretario general de Uteca, Jorge del Corral, que «las televisiones públicas y locales deben tener todas el modelo de TVE (financiación sin ingresos publicitarios), para evitar la competencia desleal», desde la Forta, la federación que agrupa a todas las autonómicas, salvo la extremeña, opinan lo contrario. Enrique Laucirica cree que «los cambios en RTVE han sido un error, porque ahora su modelo de financiación no está claro. El nuestro, con una doble vía de ingresos, presupuestos públicos y publicidad, es más sostenible». asegura. Esta afirmación no se corresponde con la audiencia de estas cadenas, que ha caído a mínimos históricos, con una cuota de pantalla media del 11 por ciento.