Finanzas
La prima de riesgo amenaza con encarecer los préstamos
El apalancamiento de la economía española continúa reduciéndose. Según los datos del Banco de España publicados ayer, la demanda de crédito de empresas y familias se contrajo en el tercer trimestre del año
Pese a todo, la deuda que las familias tienen contraídas con las entidades financieras ascendía en septiembre a 901.472 millones de euros, un nivel muy similar al registrado en el mes de enero, y lejos del techo de 911.300 millones alcanzado en junio pasado. La deuda de las empresas supera ligeramente los 1,3 billones.
La institución monetaria advirtió ayer de que la demanda de créditos volverá a la senda de crecimiento en estos últimos meses del año y de que la prima de riesgo de España puede encarecer el coste de la financiación de empresas y familias. Para las primeras, el aumento del riesgo-país de España es un elemento que presiona al alza los costes de captación de pasivo en los mercados, situación que puede trasladarse a los tipos de interés de los préstamos de las entidades financieras a la economía española.
Vuelve el miedo
Ayer, la prima de riesgo regresó a niveles previos a la publicación de las pruebas de estrés de la banca europea, es decir, por encima de los 200 puntos básicos (2%) sobre el bono alemán. Al final, al cierre de la sesión, España salvó los muebles y el diferencial con Alemania acabó en 194 puntos, después de los ataques de los inversores contra la deuda griega. La rentabilidad de los bonos de este país tuvo que elevarse hasta el 11,44%, casi siete puntos porcentuales más que el rendimiento de los bonos españoles a diez años.
La Encuesta de Préstamos Bancarios del Banco de España muestra que las entidades financieras esperan un incremento de las peticiones de fondos en todos los segmentos, con la única excepción de los créditos para el consumo. Bancos y cajas no tiene previsto endurecer las condiciones de aprobación de nuevos créditos para particulares, aunque sí para las empresas en el caso de las operaciones a más largo plazo.
A lo largo del tercer trimestre, las entidades no han incrementado el nivel de exigencias de sus condiciones para que el dinero fluya, situación que contrasta con la vivida tres meses antes.
El euribor se tomó ayer un respiro y cerró a 1,543%, una milésima por encima de la media acumulada en los cinco primeros días del presente mes.
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