Marbella

«Marbella dejará de ser una ciudad sin ley con la visita de Michelle Obama»

El subdirector de Opinión del periódico La Razón, José Antonio Álvarez Gundín, afirmó hoy que, a efectos internacionales, la visita de Michelle Obama, esposa del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su hija pequeña a Marbella (Málaga) es "muy beneficiosa"para este municipio, que, según declaró, "dejará de ser una ciudad sin ley para convertirse nada menos que en una ciudad amable".

De esta forma, Alvarez aseguró durante su intervención en el Curso de Verano 'Los medios como conformadores de la imagen', organizado en Marbella por la Universidad de Málaga (UMA), que "ni todos los periódicos del mundo hubieran conseguido una imagen tan buena como esta visita". En este sentido, añadió que ha "palpado la emoción de la gente de Marbella por haber sido elegida".

Aseguró que supone "un punto y aparte"para Marbella y manifestó su alegría por el Ayuntamiento, "que está trabajando duramente para limpiar la imagen y demostrar que Marbella no son cuatro chorizos ni cuatro mafiosos, sino que son miles y miles de personas honradas y trabajadoras, que, además, han hecho una ciudad fantástica y con prestigio".

Asimismo, calificó la visita como "una hazaña que no está al alcance de ninguna de las ciudades del mundo"y resaltó que "Marbella, que ha estado en los últimos años en el ojo del huracán del escándalo, de repente es capaz de atraer a la familia del presidente de EEUU".

Respecto a la figura de Barack Obama, afirmó que "es un presidente que ha caído muy bien en España, al margen del partido político". De este modo, aseguró que "contenta y satisface del mimo modo a populares y socialistas".

Por este motivo, opinó que la labor de los medios reside ahora en "informar, informar e informar hasta el último detalle", por lo que para los periodistas "es una delicia enfrentarse a un acontecimiento
como éste".


Presiones

Asimismo, el subdirector de Opinión de La Razón advirtió de "la obligación ingrata por parte de las personas que trabajan en la prensa escrita y que desempeñan cargos de responsabilidad de decir que no a la presión ejercida por políticos, empresarios, anunciantes, gente poderosa y hasta de novelistas, poetas y pintores".

Esto, según precisó, supone "una presión de segundo nivel que tenemos todos los días". Habría, no obstante, "una presión de primer nivel, que es mucho más seria y más sorda, y que está por la parte de arriba".

Asimismo, Gundín abordó "la encrucijada épica y deontológica" la que se enfrenta la profesión y los medios de comunicación en relación con los casos de corrupción de procesos judiciales abiertos ontra políticos, empresarios, concejales y distintas personalidades.