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La «vieja señora» quiere reinar
Madrid- Tras unos años difíciles, la Juventus, la «Vecchia Signora», regresa a lo más alto y comparte el mando en la Liga con el Milan. El club más laureado de Italia ha conseguido, tras una dura travesía del desierto, con escándalos y sanciones en su haber, resurgir para volver a la élite.
Han pasado muchas cosas desde que se viese salpicada en el que dicen ha sido el escándalo más grave del «calcio». Perdió dos títulos (04-05 y 05-06) en los juzgados y fue descendida a la Serie B. Tardó un año en volver, de la mano del francés Deschamps, y el 25 de agosto de 2007 ganaba al Livorno (5-1) en su regreso. Ranieri era el entrenador. Una buena temporada, acabó tercera, jugó la «Champions» el curso siguiente, se enfrentó al Real Madrid en la fase de grupos y cayó, luego, con el Chelsea. Las cosas no funcionaron, a Ranieri le cortaron la cabeza y fue Ferrara el que ocupó el banquillo. Segunda quedó, detrás del inalcanzable Inter de Mourinho.
El buen camino trazado se torció la temporada pasada. Los refuerzos no dieron juego, fue séptima en la Liga, apeada por el Inter en cuartos de Copa, tampoco pasó la fase de grupos de la Liga de campeones. Tercera, jugó la Europa Liga donde fue eliminada por el Fulham en octavos. Del Neri tomó el testigo de Ferrara en el banquillo y una de las pocas estrellas que no se marchó cuando el descenso, David Trezeguet emprendió la huida para recalar en el Hércules de Alicante por donde pasó con más pena que gloria. Años antes habían desertado Cannavaro (Real Madrid), Thuram y Zambrotta (Barcelona), Ibrahimovic (Inter) y hasta el mismísimo Fabio Capello.
Buffon y Del Piero han sido los más fieles, los que han pasado todas las calamidades y los que aspiran a conseguir este año el «scudetto». Del Piero, 37 años, ha anunciado que dejará el club al finalizar la temporada, y querrá colgar las botas –si no le puede la nostalgia– con el último título de su carrera. Lo mismo le pasa a Buffon (34), que aspira a defender la portería de Italia en la próxima Eurocopa.
Ellos son las señas de identidad de una Juve que se reforzó con el veterano Pirlo (Milan) y que tiene en el banquillo un hombre carismático como Antonio Conte. Un buen grupo en donde han explotado futbolistas como Marchisio, Matri y Simone Pepe. También el chileno Arturo Vidal ha progresado desde que llegó a Italia. Lo mismo que Chiellini y Bonucci.
Un bloque que no brilla en exceso, pero que trabaja mucho, defiende muy bien y sabe manejar los partidos por la experiencia de algunos de sus hombres.
¿Ganar el título? Ése es el deseo de los dirigentes. La «señora» tiene tirón en Italia –aunque los turineses son del Torino– y quiere volver a reinar. Su historia –algo parecido le pasa al Madrid– así lo demanda. Con permiso del Milan y el Udinese 2012 puede ser su año.
Antonio Conte, la primera oportunidad
Trece años como jugador de la Juventus le han servido a Antonio Conte para que el club de sus amores le diera una oportunidad en el banquillo. Los dirigentes decidieron el pasado verano que Antonio (42 años) podría ser el encargado de darle un título al club, después de su travesía en el desierto. Y la realidad es que el técnico no ha defraudado. Ha puesto toda su experiencia como jugador –estuvo en el Mundial del 94 en Estados Unidos, donde Italia fue finalista, y en la Eurocopa de 2000, también finalista– para convencer a los jugadores de que se aspiraba a todo. Conte antes de llegar a la Juve se ha curtido en equipos como el Arezzo, el Bari, el Atalanta y el Siena, al que ascendió a la Serie A tras finalizar en segunda posición. Ahora, el reto es otro.
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