Miles de universitarios exigen a la Generalitat que congele las tasas

VALENCIA- Los recortes en materia de educación y la subida de las tasas académicas llevaron ayer a miles de estudiantes a manifestarse por las calles de Valencia. La protesta, que acabó con una sentada frente al Palau de la Generalitat, estaba encabezada por una pancarta con el lema «Per una Universitat pública i de qualitat», tras la cual los estudiantes coreaban lemas contra los responsables de educación en el Ministerio y la Generalitat como «No subáis las tasas, bájate el sueldo» y «No es una crisis, es una estafa».

A su llegada a la Plaza de la Virgen, dos representantes de los estudiantes leyeron un manifiesto en el que exigían al Ministerio de Educación y a la Generalitat que «deje de desprestigiar» a la universidad pública, y retire las medidas derivadas del Real Decreto-Ley 14/2012 de 20 de abril, sobre la racionalización del gasto público en el ámbito educativo. Según los convocantes, «el único objetivo de esta medida es la privatización de la educación».

«Los estudiantes rechazamos la subida de las tasas teniendo en cuenta el impacto económico que supondrá en nuestras familias», señalaron al término de la protesta. Además exigieron que se garanticen las ayudas a través de becas, que permitan la igualdad de oportunidades y el derecho fundamental al acceso a la educación superior.

Cristina Pastor, secretaria general de la Coordinadora de Representantes de Estudiantes Universitarios (CREU), una de las organizaciones convocantes, criticó que, más que solucionar y suponer un incremento de la liquidez de las universidades, las medidas van a conllevar un descenso del ingreso de los jóvenes y un incremento en las tasas de abandono de las universidades.

Asimismo, vaticinó que muchos estudiantes se verán abocados a optar por la FP en lugar de estudios superiores. «No es la mejor salida a la crisis económica actual». De igual modo, defendió que «no es cuestión de colores, es cuestión de ver que las familias no están pasando un buen momento y sus hijos también merecen tener opciones de futuro».