El Parlament cita al secretario del Govern por el «caso Palau»

BARCELONA- Apenas tres semanas después de asumir el poder, el Govern de CiU sorprendió a propios y extraños dirigiendo dos escritos al juez para que no imputara a los cargos de Convergència salpicados por el «caso Palau», el ex tesorero de CDC, Daniel Osàcar ,y el secretario de inmigración convergente, Àngel Colom. La Generalitat dio así un giro copernicano a la postura que había mantenido durante el proceso y levantó críticas por instrumentalizar los servicios jurídicos de la administración. Poco después, la oposición pidió la comparecencia en el Parlament del secretario del Govern, Germà Gordó, pero hasta ayer no se salió con la suya.
CiU evitó en marzo el primer intento de citar a Gordó en la comisión parlamentaria de Asuntos Institucionales gracias a la ayuda del grupo mixto –representado por un diputado de Solidaritat en esta comisión–, pero no pudo impedir que prosperara la petición que ayer se votó en la comisión de Justicia porque aquí el representante del grupo mixto pertenece a Ciutadans. De hecho, CiU acabó por votar a favor para dar credibilidad a que no tiene «nada que esconder».
La oposición llegó a amagar con pedir la comparecencia de Artur Mas, pero al final prefirió no forzar tanto la situación y el presidente de la Generalitat únicamente tuvo que dar explicaciones en una sesión de control. «No ha habido ninguna orden a los servicios jurídicos para que hubiera ningún cambio de criterio. La decisión es estrictamente jurídico», aseguró.
Sin embargo, la oposición no dio ningún crédito a esta explicación y, por eso, centró su mirada en Germà Gordó, a quien atribuyen la ejecución de las órdenes desde la sombra. Ahora bien, el portavoz parlamentario de CiU, Jordi Turull, ya avanzó ayer que el secretario del Govern no piensa desvelar grandes exclusivas. «Poca cosa podrá explicar porque la estrategia jurídica de la Generalitat la llevan los abogados de la administración», dijo.

La marcha atrás
La afirmación de Turull es tan cierta como cierto es que la dirección del gabinete jurídico de la Generalitat es un cargo de confianza que CiU se encargó de modificar a su llegada al poder. Antes, cuando el Consorcio del Palau –integrado por el Ayuntamiento, el Ministerio de Cultura y la Generalitat– pidió la imputación de Osàcar y Colom, el director era Jaume Galofré. Desde enero, la directora es Margarida Gil, que ya ocupó un cargo de confianza en los tiempos de Pujol. El ex tripartito también quiso que compareciera, pero no lo lograron porque el PP y CiU votaron en contra.
Así que será Gordó en solitario quien responda a las preguntas sobre el giro jurídico de la Generalitat y por qué no se pidieron nuevas responsabilidades en el caso de las presuntas comisiones de Ferrovial a CDC mediante el Palau de la Música.