Energía

Adiós a los frigoríficos y congeladores más ineficientes en la UE

Desaparecen los equipos de refrigeración que no son de la clase A (A, A+ y A++) 

Imagen de archivo de una frigorífico
Imagen de archivo de una frigoríficolarazon

Si tiene que comprar un frigorífico nuevo para su vivienda, sepa que desde el jueves ha entrado en vigor la directiva Eco-Diseño por la cual se han de retirar todos los frigoríficos y congeladores que sean ineficientes energéticamente. De modo que sólo están a la venta los electrodomésticos de refrigeración de la clase A (A, A+ y A++). Se han eliminado por tanto los equipos que se clasificaban desde la clase B a la G en todos los Estados miembros.
En los hogares se consume el 25 por ciento las necesidades energéticas de la Unión Europea. La electricidad utilizada para los electrodomésticos en los hogares muestra un aumento. Esta iniciativa permitirá poner fin a esta tendencia y así lograr reducir ese 20 por ciento de despilfarro energético que promueve la UE para 2020 dentro del famoso 20, 20, 20.
De ahí que hace prácticamente un mes el Comisario Europeo de la Energía diera la bienvenida a la adopción de la Directiva sobre etiquetado energético por el Parlamento Europeo. La adopción en mayo de «la refundición de la Directiva sobre etiquetado energético por el Parlamento Europeo es un paso importante hacia nuestro objetivo de ahorro de energía para 2020. Allana el camino para una nueva etiqueta de consumo energético que ayudará a los consumidores a ahorrar energía y a la UE a que cumpla su compromiso sobre la reducción de las emisiones de dióxido de carbono (CO2)».
Además, lo de que sean electrodomésticos más eficientes no sólo es positivo para el medio ambiente, sino también para el bolsillo, ya que permitirá reducir las facturas eléctricas de los hogares.
Desde algunas organizaciones como WWF aplauden esta iniciativa, aunque recuerdan que al disponer a partir de ahora de una sola clase energética puede hacer pensar al consumidor que todo frigorífico o congelador de clase A es de bajo consumo energético. Por este motivo, desde WWF aconsejan a los ciudadanos prestar atención a la letra pequeña de las etiquetas y optar por equipos de refrigeración de clases A+ o A++, que garantizan los mayores niveles de eficiencia energética.

Menos grande, mejor
En concreto, los de clase A+ tienen un consumo inferior al 42 por ciento del aparato equivalente medio y el del A ++ es un consumo por debajo del 30 por ciento.
Pero lo más importante de todo es que hay que elegir un electrodoméstico que responda a nuestras necesidades, porque, y según los datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), un frigorífico de clase A de 300 litros de capacidad puede gastar más electricidad que uno de clase G de 100 litros.