Libros

Siria

El garrote selectivo

La Razón
La RazónLa Razón

No hay nada como la fe del converso. Por eso hay que aprovechar el ardor guerrero que arrebata a Zapatero y Chacón para impulsar la intervención en Siria por motivos humanitarios. En mi lista tengo también Bahréin, Somalia, Sudán y Arabia. La más acuciante es la dictadura hereditaria de Bashar al-Asad. Este oftalmólogo que heredó el poder de su sanguinario padre, Hafez al-Asad, también masacra a su pueblo. Francia fue la potencia colonial, tras el caprichoso reparto que los ganadores de la I Guerra Mundial hicieron del Imperio otomano. Eso de las intervenciones por motivos humanitarios, muy a lo «flower power», es un interesante desarrollo de la filosofía que impregna la desaparecida Alianza de Civilizaciones. En realidad es la técnica del garrote selectivo, por utilizar un lenguaje más directo, que permite la intervención selectiva en función de intereses geopolíticos, mediáticos o electorales. Los ardorosos guerreros niegan que la acción en Libia sea una guerra, pero lo parece y creo que lo es.